El Cádiz Club de Fútbol Virgili volvía a verse las caras contra la Unión Deportiva Alchoyano en pretemporada, pero esta vez lo hacía en el Pabellón Pico del Campo de Alcalá de los Gazules para disputar el VIII Trofeo Nuestra Señora de los Santos al que había sido invitado el equipo cadista. Y la copa se quedó, merecidamente, en casa.
Tardó en entrar en el partido el Virgili, pero cuando lo hizo se vieron muy buenos minutos sobre la pista, con un buen trabajo en defensa, salvo algún error puntual que significó gol en contra. Después de ponerse el Alchoyano con 2-0 a favor, el equipo cadista logró empatar el partido gracias a los tantos de Ale Paleta y de Sandro para llegar al descanso con el 2-2 en el electrónico.
Durante la primera parte fue expulsado Jorge Arriaza por dos acciones de juego. La primera tarjeta, con un error admitido de uno de los colegiados, por sacar rápido sin haber pedido barrera, que no fue solicitada por el jugador, y la segunda por una mano.
En la segunda parte, la primera jugada, el Alchoyano hace el tercero y en los minutos posteriores anota dos más para situar el marcador en 5-2. Nuevamente, el Virgili se queda en inferioridad por expulsión de Sandro, al entender uno de los árbitros un menosprecio hacia él en una conversación que el jugador cadista mantuvo con uno rival.
Los amarillos, hoy vistiendo de azul, aguantaron bien el periodo en inferioridad, pero luego el Alchoyano vuelve a anotar y a hacer el 6-2.
Los minutos más locos se vivieron después, con un buen arranque del Virgili, que anotó tres goles en muy poco tiempo para situar el electrónico en 6-5. Ale Paleta, Joselito y, nuevamente Ale Paleta fueron los autores de los tantos cadistas. Y a falta de 13 segundos, el Alchoyano volvía a anotar para hacer el 7-5 final.
A pesar del resultado, uno de los aspectos más positivos han sido los minutos del juvenil Víctor Jiménez, que ya el año pasado debutó con el primer equipo siendo cadete.
Nacho Arregui, valoró al final del partido que «el trabajo de pretemporada ha sido excelente y los errores que hemos detectado los corregiremos en las próximas sesiones de entrenamientos. La predisposición de los jugadores es muy buena y están con muchas ganas de llegar a su mejor nivel. Los que trabajamos con ellos día a día sabemos el potencial del equipo. El esfuerzo diario se irá traduciendo en resultados».