Las calles del centro de Jerez de la Frontera (Cádiz), plazas y locales acogerán este sábado, 3 de diciembre, una treintena de zambombas, cuya celebración se mantiene a pesar de que la previsión meteorológica de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) estima un 70% de probabilidad de lluvias a partir de las 12,00 horas.
Según el calendario de zambombas, consultado por Europa Press, muchas de las hermandades de cofradías de Semana Santa han establecido este sábado para celebrar una de las fiestas más singulares de la Navidad jerezana, declaradas como Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía, entre ellas, las de la Hermandad de La Viga en la Catedral, La Yedra en La Plazuela, La Candelaria en su casa de hermandad o la del Santo Crucifijo en el barrio flamenco de San Miguel.
Desde las 13,00 horas y hasta las 00,00 horas de la noche, se prevé que las plazas, casas de hermandades y establecimientos del municipio jerezano se llenen de gente para participar en estas zambombas, que siguen adelante, en su mayoría, a pesar de la previsión meteorológica, que da elevadas probabilidades de lluvia desde las 12,00 horas y hasta la medianoche, aumentando al 95% a partir de las 18,00 horas del sábado.
Además de las citadas, hay zambombas organizadas por las hermandades del Perdón en su Ermita de Guía, la Sagrada Cena en la plaza de la Asunción, Las Tres Caídas en la Plaza de San Lucas, a las puertas de su iglesia, o de Las Angustias también en su plaza, además de la zambomba de la Peña flamenca ‘La Bulería’ en la calle Empedrada, entre otras muchas.
Para este domingo, 4 de diciembre, hay previstas una decena de zambombas, que se continuarán casi sin pausa hasta el 24 de diciembre, día en que se pone fin a estas celebraciones antes de las tradicionales cenas de Nochebuena, y donde el centro de Jerez se convierte en una gran zambomba.
Las zambombas de Jerez y Arcos fueron declaradas como Bien de Interés Cultural (BIC) por la Junta de Andalucía en 2015, al constituir «una manifestación cultural excepcional que se erige como una de las celebraciones navideñas más genuinas de Andalucía». «Su dimensión social, simbólica e identitaria así como su riqueza lírico-musical», son los principales argumentos que recoge la inscripción en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.