La diputada de Desarrollo Democrático de la Diputación de Cádiz, Lucía Trujillo, ha recibido la visita de una delegación de la ONGD Mujeres Creando, una organización que desarrolla su trabajo en Bolivia y que trabajan con mujeres que han sufrido violencia machista. Sus componentes son mujeres de diferentes orígenes culturales, sociales y étnicos.
Según ha señalado la Diputación de Cádiz en una nota, la visita a Cádiz persigue dar a conocer su entidad e intercambiar con representantes de instituciones, colectivos feministas y activistas y generar un espacio de diálogo sobre las luchas feministas.
Esta entidad dispone de un servicio integral llamado ‘Mujeres en busca de justicia’ que desarrolla un acompañamiento a las que han sufrido violencia machista a través de un grupo multidisciplinar compuesto por psicólogas, abogadas y trabajadoras sociales. Así, se encarga de darles apoyo durante el proceso judicial y administrativo que estas mujeres tienen que emprender en busca del restablecimiento de sus derechos, no exento de dificultades burocráticas y psicológicas. Trujillo ha conocido este proyecto y ha explicado cómo funciona el Servicio de Cooperación Internacional en aras de poder colaborar «en los próximos años».
Entre las integrantes de la delegación que se ha entrevistado con la diputada figuran la abogada al frente de la lucha contra la usura bancaria y el endeudamiento de las mujeres en La Paz, Mayra Rojas Castro; la primera mujer indígena aimara que se graduó como chef, Emiliana Quispe; o una psicóloga que trabaja directamente con mujeres víctimas de violencia de género, Rayza Zeballos. Junto a ellas, han asistido a la reunión Manuel Martínez Ocón y Carmen Ruíz Mulas, de Solidaridad Internacional Andalucía.
Este movimiento feminista tiene sede en la capital de Bolivia, La Paz, y fue creado en 1990. Utiliza la creatividad como un instrumento de resistencia y de participación social para reducir la pronunciada brecha de género que existe en el país americano. Uno de sus fines primordiales es la lucha contra las diferentes expresiones de violencia hacia las mujeres y para ello utilizan la creación artística y los medios de comunicación para denunciarlas y, sobre todo, para cambiar las bases culturales sobre las que se asientan.