La crisis energética agudizada con la invasión de Ucrania y el cambio climático han confirmado la necesidad de acelerar la transición hacia fuentes de energía más sostenibles y menos dependientes en el seno de la Unión Europea. En esta aspiración la provincia de Cádiz, y más concretamente el Campo de Gibraltar, se perfilan como protagonistas a través de iniciativas como el Corredor Marítimo del Hidrógeno Verde que conectará el puerto de la Bahía de Algeciras con el puerto de Rotterdam. Este proyecto se plantea ya como una alianza formal entre España y los Países Bajos, tal como ha quedado de manifiesto en la jornada ‘Acelerando la transición energética de Europa’, celebrada en Algeciras con participación de los Jefes de ambos Estados –los reyes Felipe VI y Guillermo Alejandro-; de la vicepresidenta tercera del Gobierno de España y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera; y del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno. El presidente en funciones de la Diputación de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, ha asistido a dicho foro y ha valorado la “excepcional oportunidad” que se abre para la provincia de Cádiz, un territorio que contribuye a la conformación del denominado Valle Andaluz del Hidrógeno Verde.
Ruiz Boix ha destacado esta oportunidad, al tiempo que ha demandado celeridad a la Junta de Andalucía “para que desarrolle de una vez un plan de formación profesional específico” adaptado a las necesidades que va a requerir la eclosión de estas nuevas fuentes de energía. “Estos proyectos se conocen desde hace 20 meses y por parte de la administración con competencias –en referencia a la Junta- aún no se sabe nada”. El presidente en funciones de Diputación insiste en que “no hay tiempo que perder” para atrapar unas oportunidades de empleo estable.
Efectivamente las provincias de Cádiz y de Huelva serán enclaves esenciales para un corredor que permitirá el traslado de amoniaco verde a Rotterdam; en el puerto neerlandés -que gestiona el 13 por ciento de la demanda energética europea- se convertirá dicha materia en hidrógeno verde o bien se utilizará directamente como combustible renovable. Para materializar este reto Cepsa, a través de su CEO, Maarten Wetselaar, ha suscrito dos acuerdos con el vicepresidente de la multinacional noruega Yara Clean Ammonia, Murali Srinivasan, y con la vicepresidenta de la compañía neerlandesa Gasunie, Helmie Botter. La alianza con Yara permitirá el transporte de amoniaco verde desde Algeciras hasta Rotterdam; mientras que la pactada con Gasunie contempla la distribución del hidrógeno verde desde el citado puerto neerlandés hacia los clústeres industriales de Alemania, Países Bajos y Dinamarca.
En este proceso Cepsa, en el marco de su Estrategia 2030 Positive Motion, aporta sus parques instalados en San Roque (Cádiz) y Palos (Huelva). En el término sanroqueño construirá una nueva planta de amoniaco verde con una capacidad de producción de hasta 750.000 toneladas. La previsión es que esté operativa en 2027, tras aplicar una inversión de 1.000 millones de euros e incentivar la creación de 3.300 puestos de trabajo entre directos, indirectos e inducidos.
Esta iniciativa se enmarca en el denominado Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, que plantea una inversión que supera los 3.000 millones de euros, la creación de 10.000 puestos de trabajo y una capacidad de producción de 300.000 toneladas de hidrógeno verde que permitirán reducir la emisión de 6 millones de toneladas de dióxido de carbono.