CCOO viene manteniendo con la EMPRESA varias reuniones para solucionar problemas laborales que están lastrando la calidad del servicio, la eficiencia de los recursos y que hunde aún más a la empresa en inoperatividad y falta de futuro.
Con la mayoría que tiene el partido de Bruno García en el Consejo de Administración de EMASA, es incomprensible la desidia del ayuntamiento que, en cuatro meses, aún no ha aprobado un plan de eficiencia en la empresa para convertirla en el instrumento principal de la movilidad y sostenibilidad de la ciudad de Cádiz.
El desinterés del Ayuntamiento de Cádiz por la empresa EMASA, y su falta de proyecto para dicha empresa, es tan manifiesto que hasta se opone en todas las reuniones a la aplicación de los artículos más elementales del Convenio Colectivo, sin dar ni una razón de su negativa.
La negativa reiterada del ayuntamiento a cumplir el convenio está negando derechos de los trabajadores y llevando a una decadencia operativa de EMASA que está repercutiendo en la calidad y eficacia de la empresa en sus funciones.
Por ejemplo, CCOO, denuncia que, en todas las reuniones de aplicación del Convenio, el ayuntamiento se niega a cubrir las plazas del personal que se jubila, se niega a aumentar la plantilla que se encuentra bajo mínimos y, recurre de forma indiscriminada a contratos de personal a través de ETT con el consiguiente aumento de gasto y precariedad laboral. Además, está creando un agravio con respecto al personal del ayuntamiento, negándose en rotundo a aplicar la jornada de 35 horas en EMASA.
La falta de un plan de eficiencia en EMASA por parte del ayuntamiento, y su negativa a aplicar el convenio, está obligando que gran parte de la plantilla tenga que realizar trabajos de superior categoría – que luego no se reconoce- pedir a trabajadores que realicen funciones cualificadas durante bastante tiempo.
Estos problemas laborales, que ya existían con la corporación anterior, no tienen ningún sentido que sigan concurriendo y lastrando el futuro de EMASA, dado que el PARTIDO POPULAR tiene una mayoría más que suficiente para solucionarlos, bastaría con que no se opusiera a la aplicación del Convenio Colectivo.
CC.OO. se asombra de la falta de cohesión de Bruno García. Se presentó con el eslogan “el cambio” y por ahora en EMASA , con una gestión cada vez más decadente e inoperativa, el cambio ha ido a peor.