El Ayuntamiento de Puerto Real (Cádiz) ha anunciado que el próximo domingo 7 de abril los restos de aquellas personas que fueron encontradas en una fosa común recibirán «un entierro digno» en el cementerio local, rindiendo de esta manera homenaje a las víctimas de la Guerra Civil en este municipio gaditano.
Este serán «un acto de memoria y justicia» con el que el municipio «se prepara para dar un último adiós» a los represaliados por el franquismo, como han indicado el Ayuntamiento en una nota.
«Este evento simbólico busca cerrar un capítulo doloroso de la historia de nuestro país recuperando y difundiendo la memoria democrática y defendiendo los valores de la democracia y los derechos y libertades fundamentales fomentando asimismo, la cohesión y solidaridad entre las diversas generaciones en torno a los principios, valores y libertades constitucionales», ha manifestado el concejal de Memoria Democrática, Antonio Gil.
La ceremonia del 7 de abril será «un reconocimiento a quienes sufrieron persecución o violencia en la defensa de sus libertades de diferentes índoles», además de ser «un momento de reflexión sobre el pasado y un paso adelante hacia la curación de las heridas que aún perduran en la sociedad española», en palabras del concejal.
Antonio Gil ha reconocido públicamente la labor de la Asociación por la recuperación Memoria Histórica, Social y Política, que ha trabajado sin descanso para identificar a las víctimas, agradeciendo su «esfuerzo» y de familias y descendientes, que ahora «podrán finalmente rendir homenaje a sus seres queridos».
Así, se ha invitado a toda la ciudadanía a unirse a este acto «de reconocimiento y respeto por aquellos que perdieron la vida durante uno de los periodos más oscuros de España».
El Ayuntamiento ha recordado que la Ley de octubre de 2022 sobre Memoria Democrática condena el golpe de Estado de 1936 y la posterior dictadura franquista, en afirmación de los principios, valores democráticos y la dignidad de las víctimas. En las fosas comunes halladas en el cementerio local se contabilizaron y exhumaron entre 2014 y 2016 en torno a 185 cuerpos, identificándose a 122 personas.