La Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía subraya la importancia del etiquetado energético como herramienta clave para fomentar un consumo responsable y sostenible. Al adquirir un electrodoméstico, elegir uno con una buena calificación de eficiencia energética no solo contribuye a un considerable ahorro energético, sino también a un ahorro económico para los consumidores.
La etiqueta energética, que se encuentra en productos como aires acondicionados, lavadoras y televisores, presenta siete niveles de eficiencia, identificados por letras que van desde ‘A’ (máxima eficiencia) hasta ‘G’ (mínima eficiencia), y colores que oscilan entre el verde oscuro (A) y el rojo (G). Además de esta categorización, la etiqueta incluye información vital, como el nombre del fabricante, el modelo del aparato y pictogramas que brindan datos adicionales sobre el mismo.
Particularmente en el caso de los aires acondicionados, la Junta enfatiza la relevancia del coeficiente de eficiencia energética estacional (SEER), que mide el rendimiento estacional. Un valor SEER más alto indica una mayor eficiencia energética, lo que se traduce en un menor consumo de energía.