La vendimia en el Marco de Jerez, en la provincia de Cádiz, ha superado ya en 11 millones de kilos de uva lo que se recogió en la campaña de 2023, cuando aún quedan unas dos semanas aproximadamente para dar por acabada la vendimia de este año.
En concreto, hasta el 1 de septiembre de 2024 ya se han recogido 61,3 millones de kilos de uva, frente a los 49,9 millones de kilos que se acumularon el 15 de septiembre del año anterior, según datos del Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen Jerez, Xéres, Sherry y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda consultados por Europa Press.
Estas cifras cuadran con las previsiones que desde el Consejo Regulador se hizo al inicio de la campaña, a primeros de agosto, y que estimaban un crecimiento de entre el 10 y 15 por ciento respecto al año anterior. De hecho, hace un mes se hablaba de en torno a 57 millones de kilos, por lo que las expectativas se están viendo superadas ampliamente.
En estos momentos están ya en funcionamiento los 32 lagares inscritos en el Consejo Regulador y que abarca a bodegas de Jerez de la Frontera, Rota, Sanlúcar, Chipiona, Chiclana, El Puerto, Trebujena y de Lebrija en la provincia de Sevilla. Más de la mitad de estos lagares (17) pertenecen a Jerez.
Este año la uva está sanitariamente muy bien al no haber tenido incidencia ninguna de enfermedades, a lo que se suma las lluvias caídas en primavera, que han sido «una bendición» para el campo, y el verano suave sin elevadas temperaturas ni olas de calor prolongadas como en veranos anteriores, como explicaba el Consejo Regulador al inicio de la campaña.
Todos estos componentes benefician a la maduración de la uva en las viñas del Marco de Jerez, que debe alcanzar la graduación mínima exigida reglamentariamente de 10,5º Baumé para su recolección, aunque lo habitual es vendimiar con niveles superiores de maduración. De hecho, la media de graduación es de 11,12 grados Baumé.
Cabe recordar, además, que durante la campaña de recogida de la uva, la Guardia Civil tiene establecido un dispositivo para supervisar los transportes de uva y de mosto que se realizan al comienzo de las labores de la vendimia.
El dispositivo de vigilancia tiene por objeto principal la protección del producto vinícola acogido a la denominación de origen protegida, evitando la entrada de producción externa, teniendo en cuenta la diferencia de precios existentes. De esta manera, se garantiza la calidad de un producto «clave» en la economía de la provincia de Cádiz, y se ayuda a mantener los estándares de calidad que diferencian a la Marca España.