El Ayuntamiento de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha iniciado el expediente para incorporar a las declaraciones de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) en el municipio el eje conformado por las calles Remedios, Santa Ana y Algarve, una relación de calles que se suman a las que ya estaban determinadas como ZAS en el centro histórico con San Pablo, Caballeros, plaza Vargas y plaza del Clavo.
Este expediente se ha iniciado después de haberse llevado a cabo las mediciones de ruido que tuvieron lugar a lo largo de este mismo año a manos de la entidad Inerco Acústica, que a su vez ha emitido un informe que determina que se están superando en estas zonas «los niveles de ruido permitidos por la ley», ha indicado el Ayuntamiento en una nota.
«Ante esta situación, tenemos la obligación de declarar estas ZAS y, por tanto, iniciamos este expediente que se publicará en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) e irá aparejado de un mes como periodo de información pública para presentar alegaciones, incluyéndose también en el referido expediente un plan zonal específico de acción para la mejora del ambiente sonoro elaborado para dichas zonas del Centro Histórico», ha comentado el delegado de Servicios Públicos, Sostenibilidad y Movilidad, Jaime Espinar.
Entre las medidas incluidas en dicho plan zonal específico, como se ha informado esta misma semana a los vecinos y vecinas de la zona, está la limitación de nuevas licencias y la limitación de horarios.
Estas son medidas que ya existían anteriormente en las primeras ZAS que se declararon por lo que no se añaden nuevas medidas restrictivas. Ahora, se ha indicado desde el Ayuntamiento, se pretende «velar» para «evitar la aglomeración de personas en la vía pública en el entorno de los negocios hosteleros».
Desde el Gobierno de Jerez han reiterado su «total predisposición a escuchar y atender todas las alegaciones» para que entre todos se pueda «intentar revertir» esta situación con medidas «proporcionadas» que «permitan conciliar el derecho al descanso de los vecinos con los intereses de los negocios de estas zonas y el ocio nocturno».
En ese sentido, se ha señalado a «buscar un equilibrio» entre afectados y comerciantes pero «cumpliendo con la ley y haciendo de Jerez una ciudad más habitable».