Más de 4.000 personas desplegadas, entre personal médico, enfermero, logista, técnicos de emergencias, conductores y psicólogos han participado en las actividades que Cruz roja desarrolla en la zona
Cruz Roja continúa apoyando a la población afectada por la dana en diferentes puntos de España, principalmente en la provincia de Valencia, donde las consecuencias de las lluvias fueron catastróficas. El mismo martes 29, Cruz Roja activó a sus equipos de Socorros en las zonas afectadas, y el miércoles 30 se comenzó a movilizar a voluntariado desde provincias cercanas para ayudar en Valencia, ante la magnitud de la emergencia. Andalucía fue de las primeras comunidades y Cádiz de las primeras provincias que envió a voluntariado hasta Valencia, el miércoles 30 de octubre, con vehículos con los que se ha apoyado en el enorme desafío logístico de ayuda humanitaria que ha supuesto ayudar a cientos de miles de personas.
Hasta ahora, Cruz Roja ha movilizado a más de 4.000 personas en Valencia para atender a la población, de las cuáles, 175 personas han partido desde las ocho provincias andaluzas: médicas, enfermeras, logistas, técnicos de emergencias, conductores y psicólogos han participado en las diferentes actividades que Cruz Roja desarrolla en los diferentes municipios afectados por la peor gota fría que se recuerda. En el caso de la provincia de Cádiz, ha sido una veintena de personas voluntarias las que han acudido a Valencia.
El despliegue de equipos de emergencia ha sido el mayor de una catástrofe en nuestro territorio: lo más urgente fue la apertura de 11 albergues provisionales, donde se dio cobijo a personas sin hogar durante la tormenta, y a las personas que se quedaron aisladas o no tenían donde refugiarse. Además, se ha apoyado en la evacuación y rescate de personas.
Se han desplegado equipos de comunicaciones, para restablecer las conexiones telefónicas y de internet en municipios incomunicados. También equipos de asistencia sanitaria, con personal médico y enfermero, que han curado heridas tanto de la población como al voluntariado y los equipos de emergencia que trabajan sobre el terreno. E igual de importantes han sido los equipos de asistencia psicológica, para acompañar y asistir a una población noqueada por la incertidumbre, el miedo y la pérdida; y los Equipos de Sensibilización en Emergencia, especializados en dar apoyo a los miles de niños y niñas afectados, y que no han podido volver a colegios.
El Centro Logístico de Cruz Roja en Andalucía ha enviado una de las cinco bombas potabilizadoras de agua, capaces de depurar cada una hasta 225.000 litros diarios, que se han desplazado hasta Valencia, que funcionan ya para abastecer de agua potable allí donde hay mayores problemas de suministro.
La respuesta de Cruz Roja no acabará aquí. Aún nos encontramos en una fase de emergencia, pero pronto las comunidades deberán empezar su recuperación y la Organización seguirá trabajando y apoyando a las personas en esta fase que se puede prolongar en el tiempo durante años. Para reforzar esta ayuda, Cruz Roja ha impulsado un llamamiento a la solidaridad que ha encontrado una gran respuesta en la población, y con el que se dará soporte a un PLAN DE RESPUESTA que incluye tanto las necesidades urgentes, como las que se presenten a medio y largo plazo.
Entre las necesidades más inmediatas, sigue siendo aún muy importante la cobertura de necesidades básicas y la recuperación de las cadenas de suministro: de alimentación y el agua potable, el abrigo y cobijo, así como garantizar la higiene y el acceso a la atención sanitaria. Estas medidas son necesarias mientras se reestablecen las cadenas de suministro, especialmente la de la alimentación en zonas incomunicadas.
Mientras aún continúa la búsqueda de personas desaparecidas, las personas supervivientes requieren información, apoyo emocional y acompañamiento en el restablecimiento del contacto. A la vez que se finalizan las tareas de respuesta inmediata, será crucial la protección de la salud emocional de las personas afectadas y de los equipos intervinientes.
También es necesaria la recuperación de la habitabilidad de las viviendas, los espacios comunitarios y la funcionalidad de los servicios públicos. Las familias requieren la limpieza y el reemplazo de enseres dañados, y la reparación de daños en sus viviendas. Y pronto se deberá recuperar la funcionalidad de los espacios públicos comunitarios, los suministros y las infraestructuras clave.
¿Cómo colaborar?
La Organización humanitaria ha habilitado diversos canales de donación, para facilitar las numerosas muestras de generosidad que está recibiendo. Por un lado, en la página web www.cruzroja.es/colabora se pueden realizar donaciones económicas de manera ‘online’. Además, se han abierto cuentas bancarias en las principales entidades bancarias, que se dedicarán a la ayuda de las comunidades damnificadas. También se han abierto canales de microdonaciones, enviando un mensaje SMS a los números 38092 y 38088 con la palabra AYUDA, cuyo coste se entregará de manera íntegra a la labor de Cruz Roja.
SANTANDER ES44 0049 0001 5321 1002 2225
BBVA ES92 0182 2370 4600 1002 2227
CAIXABANK ES28 2100 0600 8502 0196 0066
SABADELL ES31 0081 5232 2800 0108 4716
BANKINTERES75 0128 0010 9701 0012 1395
B. COOPERATIVO ES86 0198 0500 8020 2205 3421
Desde un primer momento, Cruz Roja priorizó las donaciones económicas, ya que éstas permiten hacer llegar la ayuda de manera más eficaz y ágil, especialmente en un contexto complejo como el de las emergencias. Esta manera de funcionar ha permitido que los recursos humanos y materiales se centren en la respuesta a la población afectada con una acción humanitaria organizada, ágil y que ayude al mismo tiempo a las comunidades y al tejido empresarial local y autonómico. El objetivo era evitar colapsos de materiales, de transportes y logísticas, y posteriormente de distribución.
Con esta manera de funcionar, Cruz Roja puede comprar exactamente lo que se necesita en cada momento, adecuando la adquisición de recursos a las demandas reales que nos solicita la población afectada. Además, al comprar los materiales en la zona afectada, se contribuye a reforzar la economía local, ayudando a comercios que también han sufrido la catástrofe.