El alcalde Bruno García encabeza la evaluación de la respuesta a la crisis energética y plantea mejoras para futuros incidentes.

El Ayuntamiento de Cádiz ha evaluado este lunes la respuesta de la ciudad al apagón eléctrico que afectó a gran parte de la Península Ibérica el pasado 28 de abril. En una reunión presidida por el alcalde Bruno García, responsables políticos y técnicos de diversas delegaciones municipales analizaron las actuaciones realizadas durante la emergencia y establecieron medidas para mejorar la respuesta ante futuros incidentes similares.
La reunión contó con la participación de responsables de la Policía Local, Protección Civil, Tráfico, Transporte y otras áreas municipales, así como representantes de las empresas públicas Aguas de Cádiz y Eléctrica de Cádiz. Durante el encuentro, se abordaron temas clave como la autonomía energética de los edificios municipales, la operatividad de las comunicaciones, el acopio de combustible y el funcionamiento de infraestructuras críticas ante cortes en el suministro eléctrico.
El alcalde García subrayó el compromiso del equipo de gobierno con el refuerzo del Plan de Emergencia Municipal para asegurar una respuesta más eficiente en futuras crisis. La activación de dicho plan durante el apagón implicó a más de 170 personas y permitió reducir los efectos de la emergencia. Entre las acciones más destacadas estuvo la regulación del tráfico en toda la ciudad debido a la falta de semáforos, así como la asistencia a personas con problemas de movilidad para garantizar su acceso a los hogares ante la inoperatividad de los ascensores.
Gracias a la rápida activación del plan, la ciudad de Cádiz pudo afrontar la emergencia de manera eficaz, sin que se produjeran incidentes graves. A raíz de este episodio, el Ayuntamiento se compromete a seguir optimizando su capacidad de respuesta ante situaciones excepcionales, priorizando la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.