Francisco Javier Díaz inicia el cultivo de más de 3.000 olivos en Hozanejos
El empresario chiclanero diversifica su inversión en el campo con un nuevo cultivo de olivos y viñas en la Bahía de Cádiz

El empresario chiclanero Francisco Javier Díaz ha puesto en marcha un innovador proyecto agrícola en la zona de Hozanejos, donde ha plantado 3.100 olivos con el objetivo de diversificar la producción y obtener una mayor rentabilidad en comparación con el cultivo tradicional de cereal. La finca, de 5,8 hectáreas, albergará además dos hectáreas dedicadas al cultivo de viñas, con la intención de consolidarse como un referente en la producción de aceite de oliva y vino en la región.
El alcalde de Chiclana, José María Román, visitó la finca acompañado del concejal Fede Díaz, destacando la relevancia de este nuevo proyecto para la economía local. Román subrayó que este tipo de iniciativas contribuyen al crecimiento y la visibilidad del sector primario de la ciudad, tradicionalmente vinculado a la pesca y la acuicultura, pero que también está experimentando un auge en el campo, con cultivos como el olivo.
El regidor recordó que en los siglos XVI y XVII Chiclana fue una zona conocida por sus olivares, pero con el tiempo los cultivos se transformaron. Hoy, se está retomando esta tradición con variedades adaptadas al clima de la zona, como la especie arbequina, conocida por su resistencia y alta calidad en la producción de aceite. “Es importante destacar que, además de nuestras industrias y polígonos, el cultivo del olivo y la producción de aceite ayudarán a cualificar aún más el destino de Chiclana”, afirmó Román.
Por su parte, Francisco Javier Díaz explicó que la idea de apostar por los olivos surgió como una oportunidad para mejorar la rentabilidad de su finca, especialmente en cultivos de secano, donde los márgenes de beneficio son menores. “Me ofrecieron plantar olivos, que son más rentables, y como me gusta mucho el campo, decidí dar el paso”, aseguró Díaz. Además, destacó que el cuidado y la poda de los olivos se realizan con maquinaria especializada, lo que optimiza la rentabilidad y permitirá obtener un aceite de oliva de kilómetro 0, es decir, completamente local.
El empresario también explicó que la viña será cultivada una vez que los olivos se afianzen, ampliando aún más la oferta agrícola de la finca. Este nuevo modelo de inversión supone un cambio significativo en los cultivos de la Bahía, marcando una tendencia hacia la diversificación agrícola y el fomento de la producción local.
El clima de la provincia de Cádiz, especialmente en la zona de la Bahía, favorece la cosecha temprana de olivos, lo que permite una ventaja competitiva para la producción de aceite en los primeros meses del año. Con esta iniciativa, Francisco Javier Díaz no solo contribuye a la economía local, sino que también impulsa el regreso de cultivos tradicionales a la región, adaptados a las condiciones climáticas actuales.