Estuvieron presentes los delegados de las siete zonas francas españolas junto a los ministros de Fomento, José Luis Ábalos, y de Hacienda, María Jesús Montero
La delegada del Estado en la Zona Franca de Cádiz, Victoria Rodríguez, ha participado este lunes en el Congreso Mundial de Zonas Francas, en el marco del Salón Internacional de la Logística (SIL) de Barcelona. El encuentro que ha servido para reforzar contactos institucionales, analizar las claves de futuro de los recintos fiscales y estudiar las posibilidades de incentivar y potenciar estos espacios. En este contexto, Barcelona ha acogido la reunión entre los siete delegados de Zonas Francas de España y la subsecretaria de Hacienda, Pilar Paneque.
En la reunión participaron los delegados Victoria Rodríguez, de Cádiz; Pere Navarro, de Barcelona; David Regades, de Vigo; Gabriel Corujo, de Las Palmas; Moisés Oxala, de Tenerife; Alfredo Sanchez Monteseirín, de Sevilla; y Fernando Cámara, de Santander.
El encuentro abordó asuntos de importancia para el desarrollo económico de las zonas francas españolas, normativa y retos, incidiendo en la innovación en procesos, digitalización de los sistemas de aduanas y colaboración con las Autoridades Portuarias para atraer comercio exterior. En el encuentro de delegados se aprobó que Vigo sea la sede de la próxima reunión de coordinación de delegados en el mes de septiembre.
El Congreso Mundial de Zonas Francas y el SIL han coincidido con la feria eDelivery sobre comercio electrónico y el congreso ALACAT también de logística. Estos eventos han servido como foco de reuniones y contactos para captar posibles inversores y en el que se ha promocionado Cádiz como destino atractivo por su ubicación privilegiada y por su gran potencial.
Victoria Rodríguez se ha mostrado satisfecha con la participación de la Zona Franca de Cádiz en los eventos y ha destacado que, con la celebración del congreso mundial de zonas francas, ha quedado claro el importante papel de estos recintos, claves a la hora de dinamizar la economía de sus áreas de influencia e impulsores de la creación de empleo y la atracción de inversión. La delegada ha explicado que en Barcelona se ha incidido en los retos a los que se enfrentan las zonas francas ante cuestiones como la transición energética, la digitalización y los nuevos sistemas productivos.
Todos los eventos celebrados en la ciudad condal contaron con el respaldo del Gobierno representado con la participación de dos de sus ministros, el de Fomento José Luis Ábalos, que inauguró oficialmente el SIL, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que fue la encargada de la apertura oficial del Congreso Mundial de Zonas Francas y que afirmó que «las zonas francas tienen que jugar un papel fundamental para hacer atractivo este polo tecnológico, pero hay que adaptar el sistema tributario al siglo XXI para unas empresas que hasta ahora han permanecido invisibles y que no están recogidas en la fiscalidad tradicional».
El Congreso Mundial de Zonas Francas, de gran relevancia para todos los recintos de este tipo que hay en el mundo, se ha celebrado por primera vez en una capital europea. En anteriores ocasiones se celebró en Dubai (2015 y 2016) -sede permanente de la Organización Mundial de Zonas Francas-, en Cartagena de Indias (2017) y la pasada edición de 2018 se celebró en los Emiratos Árabes Unidos.
Las zonas francas son áreas con exenciones fiscales y con una naturaleza jurídica que varía según los países y de un continente a otro. En España las zonas francas son entes públicos, algo que no ocurre en otros países y por ejemplo en Iberoamérica todas son privadas.
Se calcula que hay en el mundo 2.500 zonas francas de trato fiscal especial en 130 países y que dan empleo a unos 70 millones de personas. Un tercio del comercio mundial pasa por estas zonas francas y el objetivo ahora es que, además de ser herramienta comercial, ganen cada vez más peso como enclaves industriales para la innovación. El Congreso Mundial concluyó con la difusión de la llamada Declaración de Barcelona, un documento de diez propuestas para mejorar las zonas francas. Entre las propuestas recogidas destacan la de apostar por una globalización más inclusiva, el fomento del transporte y la logística para el desarrollo económico mundial, y una cooperación internacional basada en la capacidad del sector privado para incrementar flujos de inversión.