El vicepresidente de la Junta informa a empresarios y a la Cámara de Comercio de Cádiz de las ventajas del decreto
El vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, ha mantenido un encuentro con representantes de los empresarios y la Cámara de Comercio de Cádiz para detallar el Decreto ley de simplificación de la regulación para el fomento de la actividad productiva, que ha sido aprobado en Consejo de Gobierno.
«El objetivo es hacer que Andalucía sea más competitiva y más atrayente para todos aquellos que quieren invertir su dinero para generar riqueza y empleo en nuestra tierra», ha planteado Marín. Se trata del decreto ley de mayor envergadura aprobado en la comunidad en los últimos 40 años: agiliza 21 leyes y seis decretos e incluye un centenar de medidas entre simplificación de procedimientos, eliminación de barreras o modificación de tasas, «ha sido un trabajo muy intenso por parte de todas las consejerías implicadas pues estamos hablando de uno de los decretos de mayor envergadura en los 40 años de nuestra autonomía», ha especificado el vicepresidente.
«Era una medida muy demanda por nuestros empresarios, autónomos y todo el tejido productivo andaluz. Cuantos más recursos y menos trabas les pongamos a los que crean puestos de trabajo y riqueza en nuestro territorio, más fácil será acortar esa brecha de convergencia que nos separa de otras comunidades en términos de empleo», ha subrayado Marín.
Además, ha dejado claro que la voluntad del Gobierno andaluz es ahondar en esa senda, «seguiremos simplificando y reduciendo trabas y requisitos allá donde sea posible. No nos vamos a detener aquí, es un punto y seguido».
La Junta de Andalucía considera que el deficiente marco normativo ha influido negativamente en la evolución económica de la región y en su convergencia con Europa: la comunidad se encuentra en una posición más vulnerable para afrontar una nueva fase de desaceleración.
El Ejecutivo andaluz estima que acercarse a la media europea en cuanto a nivel regulatorio puede elevar el PIB per cápita andaluz alrededor de un 2,5% en un plazo de entre cinco y diez años.
A pesar de la incertidumbre en los mercados y la economía internacional, Marín ha quedado lanzar un mensaje de tranquilidad y normalidad, «hemos pasado por algunas vicisitudes a lo largo de este año y la mejor noticia que podemos dar es que Andalucía sigue creciendo».