“La escuela y el modelo educativo requieren la adopción de decisiones que han de contar con la visión propositiva de toda la comunidad educativa,” fue una de las conclusiones
Este jueves tuvo lugar un encuentro virtual, organizado por EQUO VERDES Andalucía e integrado en su proyecto Conversaciones Rumbo Verde que, en esta ocasión, se ha dedicado íntegramente a las incertidumbres que presenta la vuelta a las escuelas andaluzas, así como a las propuestas que la comunidad educativa aporta para hacer frente a una situación que nos apremia a corto plazo, pero que sugiere cambios profundos a medio y largo plazo del sistema educativo en su conjunto.
Esteban de Manuel e Isabel Brito Cabeza, coportavoces de EQUO VERDES en Andalucía, insisten en que “la improvisación no nos sirve, por ineficaz y frágil. Septiembre, a la vuelta de la esquina, nos apremia para la toma de decisiones, pero es una oportunidad para no perder la perspectiva de una escuela más inclusiva y mejor para el futuro.”
A la conversación virtual asistieron como ponentes Ignacio Calderón (profesor e investigador educativo de la Universidad de Málaga), Teresa Pablos (integrante de AMPAS Escuelas de Calor), Libertad Benítez (Orientadora educativa y ex parlamentaria andaluza), Pepito Rueda García (experto en Lengua de Signos Española y presidente de ASOAL), así como personas clave por su implicación directa en la planificación de la vuelta a las escuelas y otras muchas provenientes de diferentes ámbitos de la comunidad educativa; familias, profesorado, asociaciones y otros colectivos.
La formación verde destaca la gran participación y diversidad de aportaciones, valorando cada una de ellas, en palabras de Concha San Martín, coordinadora del grupo de Cuidados Rumbo Verde, como “propuestas que no pueden quedarse sin voz pública, ya que cada maestro o maestra, cada madre o padre, cada alumno o alumna ha hecho un esfuerzo titánico para soportar estos meses las grandes carencias que sin duda ya existían antes de esta crisis sanitaria.”
Fueron muchas las cuestiones planteadas a priori: “¿Es posible, en tiempo récord, habilitar los centros educativos y aumentar el número de profesorado para dar respuesta a esta necesidad sanitaria y social? ¿Son las escuelas lugares para la educación o para la conciliación? ¿Qué hemos aprendido en esta etapa de confinamiento, tanto las familias como el personal docente?” Pero todas ellas, según afirma Mar González, integrante de la formación ecologista y moderadora de la conversación, “han de trascender a su carácter simplificador de una cuestión que no podemos volver a postergar, y es preguntarnos colectiva y seriamente a qué modelo de escuela queremos volver”.
Las conclusiones a las que se llegó tras el encuentro fueron muchas y servirán como punto de partida para la creación de un espacio deliberativo y activo. De ellas destacan que:
- “No podemos volver a la normalidad escolar pre COVID-19, puesto que dicha normalidad era ya deficiente y no respondía a las necesidades que la sociedad actual presenta, ya que potencia las desigualdades por razones de diversidad funcional o social.”
- “Urge aumentar la inversión en educación y blindarla, para acometer una transformación profunda que redundaría en una disminución de la ratio actual y un aumento del profesorado, especialmente preparado para atender a la diversidad.”
- Sobre los espacios educativos se ha propuesto “que no sólo se tenga en cuenta para dar respuesta a la necesidad urgente de afrontar una distancia social imposible de implementar, sino también para adoptar una nueva visión de un modelo de educación en comunidad y para la vida.”
- Otras cuestiones, como la necesaria revisión del currículo; qué se enseña y cómo; el papel limitante del libro de texto, tanto a nivel pedagógico como económico; el valor actual de la evaluación tradicional, que responde más bien a los intereses del mundo laboral; o la necesidad de estrechar lazos entre escuela y familias, tan implicadas e ignoradas durante esta etapa de educación no presencial, han sido recogidas entre las propuestas clave para una transformación completa del sistema educativo, que el grupo de asistentes, de forma unánime, ha reclamado.
Estas y otras ideas de próximos encuentros, según EQUO VERDES Andalucía, “tienen el objetivo de establecer redes y sinergias entre las personas directamente implicadas y afectadas, así como presentar un plan de acción al gobierno andaluz, fruto de un gran consenso social para conseguir una escuela inclusiva, que eduque para la vida; una escuela transformada y con vocación transformadora.”