El grupo municipal denuncia el deterioro de los servicios públicos, la falta de vivienda social y la connivencia del alcalde con la Junta y las constructoras
El Grupo Municipal Adelante Izquierda Gaditana (AIG) ha realizado un balance crítico sobre los dos años de mandato de Bruno García al frente del Ayuntamiento de Cádiz, señalando que “los únicos beneficiados con el cambio de gobierno son el Partido Popular y las constructoras”. La coalición de izquierdas denuncia que, mientras para la Junta de Andalucía el trabajo con el alcalde “es muy fácil”, para los ciudadanos de Cádiz el día a día se ha vuelto más difícil.
David de la Cruz, portavoz de AIG, ha subrayado que “Bruno García ha demostrado ser un alcalde que facilita la gestión a la Junta, que solo se acuerda de Cádiz para hacer caja”. Además, ha alertado de un “modelo de ciudad hipotecado a medio y largo plazo”, en el que se renuncia a proyectos clave como el cinturón universitario, el uso cultural del edificio de Náutica o las pistas deportivas en el Campo de las Balas. “La ciudad se deteriora, mientras que las constructoras explotan suelos públicos para viviendas de lujo, expulsando a familias gaditanas”, ha denunciado.
El grupo municipal ha destacado también el empeoramiento de los servicios públicos, que afrontan “la mayor crisis de limpieza, recortes en alumbrado público, falta de renovación en el transporte y una Junta que reduce la inversión en sanidad y educación sin que el Ayuntamiento reaccione”.
En materia de vivienda, Helena Fernández, portavoz adjunta de AIG, ha criticado la gestión del equipo de Gobierno, que “no ha entregado ni una sola vivienda pública en dos años”, pero sí ha desahuciado a familias en situación vulnerable sin respetar protocolos antidesahucios. La edil advierte que solo están en marcha proyectos heredados y que el Ayuntamiento planea regresar a políticas de venta de viviendas protegidas, dejando de lado la función social de la empresa municipal de vivienda.
Fernández también ha denunciado la “política social de mentira” del Gobierno local, que presume de un Plan de Inclusión Social para personas sin hogar mientras colectivos denuncian maltratos en espacios públicos. Además, critica el desmantelamiento de los cauces de participación social, como la cancelación del Plan Local de Salud o la paralización de la Mesa de la Discapacidad y del pliego de accesibilidad universal.
Por último, David de la Cruz y Helena Fernández han señalado posibles conflictos de interés y falta de ética en la gestión municipal. Critican la “incompatibilidad flagrante” de la concejala de Vivienda, Ana Sanjuán, vinculada al sector constructor, y denuncian incumplimientos en derechos laborales en la Delegación de Asuntos Sociales bajo la responsabilidad de Pablo Otero, lo que afecta a la plantilla y a los servicios sociales, como el de ayuda a domicilio.
El balance de Adelante Izquierda Gaditana pone en evidencia una gestión municipal que, a juicio de la oposición, prioriza los intereses políticos y empresariales por encima de las necesidades y derechos de los gaditanos.
