Como cada año, desde la Asociación de Afectados por el accidente del Transformador 29272 en Tarifa han recordado el trágico suceso ocurrido el 5 de agosto de 2017. Este año, en el que se cumple el cuarto aniversario, han apuntado que, «tras conocer las conclusiones de los informes periciales se sabe que la causa de la deflagración se debió al régimen de sobrecargas severo al que estaba siendo sometido el transformador de alta tensión desde, por lo menos, el año 2013 y, presumiblemente, desde 2009», y han añadido que «las sobrecargas se producían prácticamente todos los días de los meses de verano, llegando a alcanzar factores de carga superiores al 175% en los momentos de mayor demanda».
Según ha informado la asociación en una nota, «dicho transformador llevaba varios años trabajando en régimen de sobrecarga», una circunstancia «que provocó su deflagración en las instalaciones del hotel 100% FUN de Tarifa, acabando con la vida de Mariluz y de Sara, y dejando a seis supervivientes con secuelas físicas y psicológicas de por vida».
Por todo ello, ha recordado que «han pasado cuatro años y se sigue esperando justicia y que la Junta de Andalucía implemente las medidas necesarias para que no haya otros casos» similares.
Además, desde la asociación han reiterado que «no consta» que Endesa, propietaria del transformador, «estuviese realizando los preceptivos análisis de capacidad de sus activos pese a ser una exigencia legal» y que, «de haber analizado la capacidad del transformador, tal y como le obliga la ley, se habría detectado el riesgo antes de producirse el accidente».
En este sentido, han apuntado que «tampoco consta que los órganos competentes en materia de industria de la Junta de Andalucía lo exigiesen o lo supervisaran» y que «si lo hubieran exigido se habría detectado la situación de riesgo».
En este punto han recordado que «la legislación de aplicación es redundante en el sentido de exigir a las empresas de distribución de energía eléctrica un análisis de capacidad de sus activos previa concesión de permisos de enganche a los nuevos abonados».
Así, la asociación ha asegurado que «en 2009 el último abonado solicitó la conexión a red de su instalación eléctrica» y que «de haberse realizado el preceptivo análisis de capacidad, el resultado obtenido de los cálculos hubiera obligado a la sustitución del transformador de 100kVA por otro de 250kVA y el accidente se hubiera evitado.
Cabe recordar que el 5 de agosto de 2017 se produjo la explosión de un transformador en un hotel de Tarifa que se cobró la vida de dos personas y produjo graves secuelas a seis más.
En este aniversario, debido a la situación por el Covid-19, la asociación ha indicado que «no se convocará la manifestación anual en Tarifa» y que, en su lugar, «se realizará un sencillo acto de izado de la bandera con el logo de la asociación en el castillo de Guzmán el Bueno en Tarifa, y a través de las redes sociales se solicitará de nuevo el apoyo de todos los que conocen la causa».