El pequeño municipio gaditano de Algar (Cádiz) comenzó en verano de 2021 una iniciativa para declarar las llamadas «charlas al fresco» como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, una «carrera de fondo» en la que están inmersos desde entonces y en la que están «casi en el final del túnel».
De esta manera ha explicado el alcalde de Algar, José Carlos Sánchez (PP), a Europa Press esta propuesta impulsada desde este municipio de los Pueblos Blancos de la Sierra de Cádiz pero que quiere hacerse extensiva al resto de localidades.
«Digo que es Algar porque nosotros hemos tenido la iniciativa de lanzar esto», ha aclarado el alcalde, quien ha comentado que «nos estamos uniendo a los demás municipios porque no queremos que pongan ‘Algar las charlas al fresco’, sino que sea que las charlas al fresco sean Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. ¿Que ha salido la idea de Algar? Sí, pero que sea en conjunto de todos los municipios».
En muchos pueblos de la provincia de Cádiz, incluido Algar, es habitual que cuando cae la tarde sus vecinos y vecinas saquen las sillas a la calle y pasen el rato hablando «al fresco» sobre cómo ha ido el día y otros asuntos, una tradición que desde este municipio gaditano quieren «defender» para que no se pierda y se valore su importancia.
Cuando en 2021, el actual alcalde decidió darle publicidad a esta tradición, no esperaba la repercusión mediática que obtuvieron con el desembarco en su pueblo de «todos» los medios de comunicación nacionales e internacionales, como la BBC. La locura se instaló entonces en el pueblo porque estaban «todo el día en la calle con las cámaras» de televisión grabando. Es por eso que ha agradecido a sus vecinos el que colaborasen cada vez que les pedían salir a la calle a escenificar estas charlas al fresco.
Fue tal la repercusión que por entonces llegaba gente de fuera con sus sillas para compartir momentos al fresco con los vecinos de Algar. «Eso para mí fue también un orgullo porque al final ha sido turismo y ha sido economía para el pueblo sacar una noticia», ha reconocido José Carlos Sánchez.
Sobre la tramitación de esta declaración ha detallado que se ha solicitado a la Junta el que esta tradición se incluya en el inventario de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, y una vez que esté inscrita, elevar el expediente a la Unesco. «Hemos estado dando pasos firmes hasta que ya parece ser que estamos encaminados hacia el reto que queremos, que las charlas al fresco sean declaradas Patrimonio Inmaterial de la Humanidad», ha añadido.
Miriam Sánchez, concejala de Turismo encargada actualmente del expediente para conseguir esta declaración, no dudó en «darle de nuevo un empujón» a la iniciativa cuando llegó al Gobierno local tras las elecciones de mayo de 2023. «Queríamos seguir defendiendo lo que es la tradición de las charlas al fresco porque no hay nada más bonito que defender lo nuestro y porque también fomenta las conexiones sociales», ha argumentado.
En ese sentido, ha defendido que esto «no sólo es cosa de mayores» sino también de los jóvenes, que participan en las actividades del pueblo y también en estas charlas al fresco, algo en lo que también coincide el alcalde, quien también busca con todo esto que «las buenas tradiciones no se pierdan» y que «las redes sociales no acaparen a los jóvenes tanto tiempo», entendiendo que «también hay tiempo de diversión y de charlar».
Sobre en qué punto se encuentra, la concejala de Turismo ha asegurado que tienen un expediente «con un proyecto muy reforzado», al contar, entre otros, con los apoyos de numerosas localidades de la provincia y de organismos superiores como la Diputación de Cádiz o la Junta de Andalucía. «Ya estamos a la espera de que nos lo concedan, de poder celebrarlo, además con todos los que han colaborado. Nos habían comentado que podría tardar unos añitos incluso, pero bueno, es que tenemos que hacerlo, no nos queda otra. Esperaremos y cuando llegue el resultado, lo disfrutaremos aún más», ha aseverado.
Para el alcalde, esto es «una carrera de fondo» en la que no saben «cuándo vamos a llegar al final», aunque están «muy encaminados» y «estamos viéndolo un poquito de luz» a pesar de la burocracia, «que ya sabemos cómo es».