La ciudad de Algeciras (Cádiz) ha guardado cinco minutos de silencio, convocados por el Ayuntamiento, en señal de duelo por la mujer asesinada por violencia de género en la localidad alicantina de L’Alfás del Pi a manos presuntamente de su pareja sentimental, ya detenido, que era natural de la ciudad algecireña, donde pensaba volver antes de ser hallada sin vida.
En declaraciones a los periodistas, el alcalde, José Ignacio Landaluce, ha afirmado que se trata de «otro asesinato ilógico, doloroso y que es difícil de asumir, como todos». «Todas las administraciones tenemos que estar comprometidas porque esto es un dolor de la sociedad entera y es un compromiso el erradicar esa violencia de toda la sociedad», ha añadido.
«Sigamos luchando, sigamos no siendo insensibles, no pasando ni una sola de las veces que hay una víctima, porque el día que pasemos de una empezamos a perder aún la batalla y tenemos que invertir por parte de todas las administraciones no sólo actuaciones, sino también compromisos de mayor dedicación a evitar este sufrimiento, esta lacra y estas pérdidas impensables en cualquier sociedad avanzada», ha añadido.
Por su parte, la hermana de la mujer asesinada ha señalado que ya había decidido recoger sus cosas y volver a Algeciras (Cádiz), su ciudad natal, «pero no dio tiempo, la mató».
En una entrevista en Canal Sur, recogida por Europa Press, la hermana ha relatado que fue a la Guardia Civil, «acompañada de un matrimonio que se encontró en la calle y la vieron muy mal» y, aunque «el matrimonio sí testificó», ella no puso finalmente la denuncia y decidió ir a recoger la ropa para volver a su ciudad natal.
En este sentido,, cabe recordar que el crimen se cometió en la madrugada del domingo al lunes en una vivienda del casco urbano de l’Alfàs y la Guardia Civil localizó el martes el cuerpo de la víctima, que había acudido el sábado a denunciar al hombre en el Puesto de la Guardia Civil de Altea, pero finalmente rechazó hacerlo cuando ya estaba en el cuarte, segúnn informó la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé.
Pese a ello, se activaron los protocolos, que incluye la comunicación permanente con la mujer, que se produjo hasta el domingo. Posteriormente, los agentes dejaron de recibir respuesta y comenzó la búsqueda, que terminó con el hallazgo de su cuerpo sin vida.
La hermana ha explicado que la víctima, «en 23 años nunca ha pagado el teléfono» y la llamó su cuñado –expareja de la hermana– el lunes para decirle que había recibido una llamada «a las 4,56 horas de la madrugada, que estaba dormido y cuando la llamó a las seis de la mañana ya tenía el teléfono apagado». «Luego me llamó mi cuñado diciendo que le había dicho la Policía que quería hablar con él a las cuatro de la tarde –del lunes–. Cuando me volvió a llamar fue para decirme que nos la habían matado», ha relatado.
La hermana ha contado que el 21 de diciembre «le dio una paliza» pero llamó a su expareja y «la salvó». Entonces «dijo que iba a cambiar los hábitos, que iba a dejar esa relación tóxica, pero no», ha dicho.
«No me dejaba que denunciara el caso porque me decía que si no la mataba a ella y a sus niños», ha contado la hermana de la víctima, que pensó «me voy a por ella, pero luego me decían, es que si mata a tus sobrinos no vas a levantar cabeza en la vida». «Era una situación muy difícil, pero ella no me escuchaba, me engañaba», ha añadido.