La Delegación de Asuntos Sociales inicia la elaboración de un Plan Estratégico cuyo objetivo es analizar la realidad de la ciudad para poder determinar cuáles son los problemas de base y los obstáculos que enfrentan tanto los usuarios como los trabajadores poder realizar una transformación real que repercuta en la mejora de la atención y la optimización de los recursos.
La concejala del ramo, Ana Fernández, acompañada del director del área, José Antonio Sánchez Cerpa y del técnico Gabriel Robles, han presentado hoy las bases y el procedimiento a través del cuál se realizará un diagnóstico sobre la situación de la ciudad que serán la base del Plan Estratégico.
Fernández se ha referido a la necesidad de elaborar un plan de este tipo “puesto que hasta ahora se venía trabajando por inercia, centrados más en la valoración y en la concesión de las ayudas sociales pero sin poder realizar inserción social, por lo que tener un plan a desarrollar en varios años permitirá dotar a los trabajadores de herramientas, analizar y valorar cómo se hacen las cosas”.
La delegada ha destacado el ritmo “frenético y desbordado” que se vive en Asuntos Sociales ante la gran demanda que existe en la ciudad. “Este día a día, nos ha hecho reflexionar sobre la necesidad de desarrollar un plan estratégico que nos permita sobre todo saber cuál es la situación real de partida, y sobre todo poder establecer un horizonte en el que se pueda actuar de manera transversal con todas las delegaciones”.
Gabriel Robles, como coordinador de la elaboración de este plan, ha explicado que “con esta iniciativa perseguimos tener algo más que una foto fija de los problemas de las carencias sociales de la población, en definitiva averiguar las causas profundas que las han provocado”. Es por esto por lo que “pretendemos que el análisis se acerque a los orígenes de la situación y que nos permita así aportar soluciones más acertadas o, por lo menos, una dirección clara de hacia dónde deben dirigirse los Servicios Sociales del siglo XXI”.
Entre los objetivos de este plan se encuentran el de recopilar y describir la situación de la ciudad a través de los indicadores sociales fundamentales, identificar las causas y dinámicas que inciden en los procesos de exclusión social, describir las estructuras de valores, pensamientos y normas colectivas de acción social de la población, detectar las necesidades y limitaciones que en materia de asuntos sociales perciben los ciudadanos, usuarios, agentes sociales y profesionales, introducir el proceso de diagnóstico metodologías participativas de investigación para potenciar la presencia de la ciudadanía y los actores claves en la construcción de aquellos planes, programas y servicios que pueden afectar su futuro y, por último, construir colectivamente las propuestas de intervención social sobre las problemáticas que abarcan los servicios sociales y para la profundización en los derechos de la ciudadanía.
La elaboración de este plan, que está prevista que concluya en diciembre, contempla tres fases siendo la primera la de identificación de la situación y tendencias, la segunda la detección de necesidades, limitaciones y obstáculos frente a valores y propuesta y una tercera fase compuesta por una taller de debate ciudadano.