Los expertos independientes están trabajando en el estudio climático y vegetal previo, en septiembre realizarán el inventario del arbolado y en octubre se celebrará la primera mesa ciudadana a través del Consejo Municipal de Medio Ambiente
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La concejala de Parques y Jardines, Rocío Sáez, ha mantenido esta semana una reunión técnica para conocer los avances en los trabajos del primer Plan Director de Arbolado de la ciudad y marcar los plazos de las próximas actuaciones. Como ya se adelantó el pasado mes de marzo, la ciudad de Cádiz ha comenzado a trabajar para tener en el plazo aproximado de un año su primer Plan Director de Arbolado Viario. En este sentido, ya se procedió por parte de la empresa concesionaria a la contratación del profesional independiente que dirigirá los trabajos, tal y como recogía el pliego técnico del servicio de mantenimiento de zonas verdes.
De este modo, el reconocido técnico arborista Luis Alberto Díaz-Galiano Moya ha comenzado sus labores y actualmente, junto a su grupo de trabajo, está llevando a cabo un estudio climático y de la situación vegetal del municipio, el cual ayudará a definir entre otras variantes cuántos árboles debería plantar la ciudad en los próximos años y qué tipo de especies son las más convenientes.
Además, ya se han iniciado también las sesiones formativas para el personal operario con dos talleres de prevención y manejo de maquinaria en el mes de julio, que se completarán con otro más para abarcar a la totalidad de la plantilla. Esta parte imprescindible de formación continuará con otro periodo en el último trimestre del año compuesto por tres cursos para trabajar temas como las podas de formación o técnicas para saber leer los síntomas que presenta el arbolado.
Asimismo, entre septiembre y octubre un equipo realizará a pie de calle un inventario exhaustivo del arbolado de la ciudad y su situación, las especies predominantes, la edad media, las principales problemáticas, entre otros, así como la creación de un mapa de riesgos.
Otra de las patas clave de la elaboración del Plan es la referente a la participación e información social y es por ello que ya se ha marcado la primera semana de octubre como la idónea para celebrar una primera sesión ciudadana, dentro del Consejo Local de Medio Ambiente y Movilidad, a fin de poner al día a los colectivos y entidades participantes y poder conocer sus impresiones.
El Plan Director de Arbolado Viario es el documento estratégico que definirá los criterios que deben regir en el cuidado del arbolado viario de la ciudad, en lo referente a mantenimiento, plantaciones, talas, sustituciones, y en general, a las labores a realizar en el arbolado. También lo será respecto al nuevo diseño urbanístico y paisajístico de la ciudad en lo que se refiere a la ubicación, criterios de elección de especies, portes de árboles y coberturas de verde.
Por otro lado, el Plan de Gestión del Arbolado parte del estado actual del arbolado y servirá para definir la gestión del mismo en un espacio de cinco a diez años, definiendo la tipología de mantenimiento necesaria de cada población/calle del arbolado con el fin de conseguir un arbolado sano y disminuir el riesgo posible de sus estructuras.
Sáez ha recalcado tras la reunión que «este camino que hemos iniciado es uno de los más necesarios que Cádiz tiene por delante, porque hay que garantizar el presente y el futuro de nuestra ciudad y en ello, el arbolado juega un papel mucho más fundamental del que a veces pensamos». Añadiendo que «nuestro Plan Director será el eje, el que consolide y mejore una conservación eficaz de nuestros árboles que ya hemos iniciado y también el que nos marque las pautas de cara a ampliar nuestro arbolado de manera decidida y sostenible».
Tras la reunión, la concejala ha visitado in situ la plaza del Árbol, donde la pasada semana se procedió a la retirada de una rama que se quebró. Tras su revisión visual, los técnicos corroboraron que los pinos de la plaza se encuentran en buen estado, si bien, bastantes años atrás se debieron de realizar podas innecesarias y agresivas que modificaron su crecimiento y pueden provocar que esta especie quiebre sus ramas para redirigirlas, aunque sin riesgo de desprendimiento.
En este sentido, durante la visita la concejala y los técnicos valoraron algunas quejas públicas que se han hecho sobre la necesidad de más podas en la ciudad considerando que «la poda puede ser un arma de doble filo, ya que permite entre otras cosas la desestructuración y desorden arquitectónico de los ejemplares, o la infección por hongos, con las consecuentes pudriciones y evolución de oquedades en ramas principales y troncos, o limpiezas mal ejecutadas que provocan posteriormente roturas de grandes ramas… En definitiva, que los males causados por las podas excesivas superan en muchos los beneficios provocados al árbol, de hecho, la mejor forma de trabajar la vitalidad de un árbol es mantener su estructura, sin eliminar partes de ésta. Con lo cual seguiremos trabajando en la misma línea que hasta ahora».
“El árbol en la ciudad debe proveer los máximos beneficios ecosistémicos para la mejora de la salud pública, y para obtener un mayor rendimiento deben ser grandes y en porte natural. Proponer reducciones de copa, sin argumentos técnicos, supone mermar esos beneficios. Sin árboles o con árboles pobres, la ciudad se convierte en un entorno desfavorable y establecer criterios de poda sin justificaciones técnicas está en contra de todas las directrices internacionales de arboricultura. Todo ello, sin olvidar las pasadas olas de calor, que han provocado más de 1.200 muertos en 9 días; por lo que la presencia del árbol y su incidencia para aportarnos sombra y aliviar las temperaturas se convierte en una necesidad cada vez mayor”, ha explicado Sáez.