La portavoz de IU y diputada provincial, Carmen Álvarez, lamenta que el alcalde olvide los motivos por los que se encadenó en 2007 al edificio para, supuestamente, ‘defenderlo’ y haya permitido este fiasco en el terreno patrimonial, económico y político.
La portavoz de IU y diputada provincial, Carmen Álvarez, denuncia el atentado que se está produciendo con la Casa de Arizón “un patrimonio que debería ser de los sanluqueños, pero que, en estos momentos, está en manos de Sareb, una entidad encargada de gestionar y vender los activos problemáticos de las entidades bancarias rescatadas”. De hecho, el hotel se encuentra en estos momentos sin actividad.
Desde Izquierda Unida el pasado año pudimos comprobar que el conjunto monumental Casa de Arizón se había dividido en 50 fincas. Así nos lo corroboraron en el Registro de la Propiedad, donde se nos facilitó nota simple de la finca y donde pudimos comprobar estos hechos con documentación oficial. De esta forma, ya advertimos en diciembre de 2020 que se estaba produciendo este escándalo monumental, algo que también fue denunciado por Aula Gerión. En concreto, denunciamos, junto a Aula Gerión, que se había procedido a la subasta del conjunto monumental, dividido en 50 lotes, subastados de forma independiente, una actuación que desintegra el Bien de Interés Cultural. La mayor parte de estas nuevas fincas registrales se correspondían con los pisos y apartamentos turísticos edificados con fachada a la calle Banda de la Playa, sobre los antiguos almacenes de los siglos XVII y XVIII, así como en la casona del XVII, además del lote constituido por el actual Hotel, contando este último con 3.500 metros cuadrados.
Hay que tener en cuenta que estos procedimientos podrían ser ilegales, ya que cualquier inmueble declarado Bien de Interés Cultural no puede segregarse al objeto de la preservación integral de su unidad monumental, como marcan las leyes de patrimonio española y andaluza.
Tras una reunión mantenida con Aula Gerión para analizar todo el asunto, la portavoz de IU y diputada provincial, Carmen Álvarez, ha insistido en que todo lo referente a esta casa de cargadores de indias ha sido un fiasco en lo económico, en lo político y en lo patrimonial. Así, en el terreno económico, al edil recuerda que “se ha destinado mucho dinero público en el proyecto, en expropiaciones, así como la realización de una plaza a través del Profea, y, en definitiva, se han puesto todas las herramientas desde la administración para que sacar adelante un proyecto que ha sido un fiasco”.
Además, en el terreno patrimonial, lamenta que “el equipo de Gobierno no ha hecho nada para proteger el patrimonio de los sanluqueños y ha permitido este atentado sobre la Casa de Arizón, que ya había sufrido las consecuencias de una rehabilitación desastrosa”. La edil recuerda que el inmueble había sufrido ya la destrucción de bodegas, y almacenes, para edificar pisos (que no se llegaron a terminar), así como la fragmentación de la casa del siglo XVII, también para la edificación de pisos y apartamentos turísticos. Además, durante todo este tiempo se han perdido materiales nobles con un alto valor histórico.
Álvarez asevera que “es muy lamentable que nadie se haya pronunciado sobre el tema, en especial la Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Sanlúcar, una concejalía que demuestra de esta forma que no existe, que se ha desmantelado y se ha integrado dentro de la Delegación de Fiestas”. “De hecho, ni siquiera hay plaza de funcionario que se encuentre supervisando y velando el Patrimonio Histórico de la localidad, ni existe una comisión de cultura, tan necesaria en la ciudad para que no se produzcan estos hechos que denunciamos”.
Álvarez le pregunta directamente al alcalde, Víctor Mora, si ya no recuerda los motivos por los que participó en encadenamiento humano, junto con Irene García y Juan Marín, organizada por Aula Gerión en 2007, para exigir entonces a la empresa Casa Grande Arizón que desistiera del proyecto de edificar un hotel y 67 dúplex y que cumpliera con su deber de conservar integralmente el Conjunto. “Para IU es una hipocresía política que olvide que, supuestamente, defendió estos objetivos, y ahora mire para otro lado mientras se produce este atentado contra el patrimonio cultural de Sanlúcar”.
Hay que recordar que La Casa de Arizón es una casa de cargadores a Indias construida en los siglos XVII y XVIII y declarada Bien de Interés Cultural en 2001. A pesar de ello, el inmueble ha sufrido desde su compra a la familia Arizón el abandono de sus nuevos propietarios y un progresivo deterioro.