El sindicato alerta de los riesgos de las altas temperaturas en la actividad laboral, lanza una campaña informativa para las personas trabajadoras y activa un mecanismo de control del cumplimiento de las jornadas especiales de verano y de la implementación de los protocolos de prevención.
La Unión Provincial de CCOO de Cádiz ha puesto en marcha una campaña, bajo el lema “El Calor Puede Matar” dentro del programa Dipuactiva con el objeto de prevenir los riesgos laborales derivados de las altas temperaturas estivales y que pueden tener como consecuencia los denominados “Golpes de Calor” que pueden tener efectos devastadores para la salud y la vida de las personas trabajadoras.
CCOO ha puesto a disposición de las personas trabajadoras y en los centros de trabajo, un folleto informativo en los que se indican las patologías asociadas al trabajo en altas temperaturas, a la vez que se indican una serie de consejos para paliar los riesgos y los síntomas y cuya detección precoz puede evitar males mayores. De igual manera pone a disposición de la afiliación de todas las personas, una web en la que consultar dudas sobre este asunto.
Asimismo, el sindicato considera como una medida preventiva de primer orden los horarios especiales de verano recogidos en muchos convenios con el objeto de evitar la actividad en las horas de más calor, siendo por ello que CCOO ha diseñado un dispositivo de vigilancia de su cumplimiento y ha animado a las personas trabajadoras a hacerles llegar los centros de trabajo donde el horario estival no se respete.
“Trasladaremos a la inspección de trabajo los incumplimientos de los convenios en materia de jornada estival por parte de las empresas, así como denunciaremos las faltas de medidas de protección que detectemos” sostiene el responsable de salud laboral de CCOO de Cádiz, David Pérez.
Para CCOO en zonas como la nuestra donde se registran importantes aumentos de las temperaturas en la temporada de verano y la afectación del cambio climático está siendo importante y resulta necesario redoblar los esfuerzos preventivos y la labor inspectoras para evitar los riesgos laborales asociados a este fenómeno.
“Es una responsabilidad de las empresas y desde la autoridad laboral se deben triplicar esfuerzos en el cumplimiento de la normativa existente en este terreno”, concluye Pérez.