Apunta maneras el Bizcocho este año con un tipo muy de su estilo. El humor negro es la especialidad de este chirigotero que, si el jurado así lo aprecia, estará en la final del viernes. Lo más memorable de la actuación fue el segundo de los pasodobles, bromeando con que un sevillano venga a Cádiz a contar o un gaditano haga lo propio en la Semana Santa sevillana. De arte. Buena tanda de cuplés, el primero para la viruela del mono y el segundo al precio de la luz.