Agentes de la Guardia Civil han desmantelado en Algodonales (Cádiz) un punto de venta de drogas, donde se ubicaba además una plantación de marihuana, donde se han incautado 114 plantas, además de 31 gramos de cocaína en roca y diversas dosis de la misma sustancia ya preparadas para su venta. El detenido, que es el propio morador de la vivienda, había instalado una compleja infraestructura eléctrica que se extraía de forma ilegal del alumbrado público.
Según ha explicado la Guardia Civil en una nota, los hechos se produjeron el pasado día 17 cuando los agentes localizaron un domicilio, que funcionaba como punto de venta de drogas al menudeo, donde se había instalado un cultivo ilegal de cannabis de los denominados indoor, que incluían lámparas de gran potencia con sus acumuladores de corriente, ventiladores de pared, equipos de aire acondicionado y potentes filtros de carbono para enmascarar el olor característico de estos cultivos y extractores de aire.
Las investigaciones realizadas y los indicios recabados permitieron que los guardias civiles ubicaran el domicilio en el que se había instalado la plantación, destacando que su responsable había tomado numerosas medidas para impedir que cualquiera pudiera sospechar desde el exterior, y que se había procedido a realizar un «enganche» ilegal desde el tendido eléctrico hacia la vivienda.
Ante la sospecha de que en el interior de la vivienda se estuviera cometiendo éste ilícito penal, organizaron un dispositivo con el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro que permitió confirmar las investigaciones que habían realizado.
En la actuación han intervenido guardias civiles de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Compañía de Villamartín y del propio puesto de Algodonales.