Agentes de la Guardia Civil han desmantelado en Chiclana de la Frontera (Cádiz) una plantación de marihuana que se había instalado en el interior de una vivienda, por lo que se ha detenido al propio morador de la vivienda, vecino de la localidad, que había instalado una compleja infraestructura eléctrica que se extraía de forma ilegal del alumbrado público. Los agentes han intervenido 242 plantas de marihuana que arrojaban un peso total de 20,5 kilos, así como todo el complejo sistema eléctrico que se había montado para favorecer y acelerar su crecimiento.
Según ha explicado la Guardia Civil en una nota, los hechos se produjeron el día 10, cuando los agentes localizaron un domicilio donde se había instalado un cultivo ilegal de cannabis de los denominados indoor, que incluían lámparas de gran potencia con sus acumuladores de corriente, ventiladores de pared, equipos de aire acondicionado y potentes filtros de carbono para enmascarar el olor característico de estos cultivos y extractores de aire.
Las investigaciones realizadas y los indicios recabados permitieron que los guardias civiles ubicaran el domicilio en el que se había instalado la plantación, destacando que su responsable había tomado numerosas medidas para impedir que cualquiera pudiera sospechar desde el exterior, y que se había procedido a realizar un «enganche» ilegal desde el tendido eléctrico hacia la vivienda.
Los guardias civiles, ante la sospecha de que en el interior de la vivienda se estuviera cometiendo éste ilícito penal, organizaron un dispositivo con el correspondiente mandamiento judicial de entrada y registro que permitió confirmar las investigaciones que habían realizado. En ésta actuación han intervenido agentes de Seguridad Ciudadana e Investigación del Puesto Principal de Chiclana.