Detenido en el puerto de Tarifa un matrimonio buscado en Países Bajos por secuestrar a sus tres hijos
La Policía Nacional interceptó a la pareja cuando intentaba huir a Marruecos con los menores, sobre los que pesaban órdenes de protección por malos tratos. La Audiencia Nacional ha decretado prisión provisional mientras se tramita su extradición.
Un matrimonio de nacionalidad holandesa ha sido detenido por la Policía Nacional en el puerto de Tarifa (Cádiz) cuando intentaba embarcar rumbo a Marruecos con sus tres hijos menores de edad, sobre los que pesaban órdenes de protección emitidas por las autoridades judiciales de Países Bajos. La pareja estaba siendo buscada por delitos de secuestro, detención ilegal y toma de rehenes, y sobre ellos recaía una orden europea de detención y entrega.
La intervención policial tuvo lugar a primera hora del domingo 18 de mayo, durante un control de salida en la línea marítima Tarifa-Tánger. El padre, con pasaporte holandés, y la madre, con pasaporte español, intentaban abandonar el país llevando consigo a los menores de forma ilegal y contraviniendo resoluciones judiciales firmes que les prohibían el contacto con los niños.
Gracias a la coordinación internacional a través de la oficina Sirene, los agentes del Puesto Fronterizo Marítimo de Tarifa detectaron la tentativa de huida y lograron impedir que el núcleo familiar abandonara el espacio Schengen. Durante la inspección, se comprobó que los adultos portaban objetos de valor, joyas y todo su dinero en efectivo, lo que evidenciaba su intención de no regresar y eludir el control judicial de su país de origen.
Según las autoridades holandesas, los menores se encontraban en una situación de alto riesgo, siendo privados deliberadamente de atención médica esencial. Uno de los niños presentaba lesiones compatibles con malos tratos, entre ellas hematomas subdérmicos con hemorragia cerebral, fracturas en el brazo, tibia y codo, y requería atención neuroquirúrgica urgente. La omisión intencionada de cuidados médicos por parte de los progenitores podría haber tenido consecuencias potencialmente mortales.
Durante la intervención, los agentes observaron en uno de los menores signos visibles de abuso físico, como hematomas, arañazos y rozaduras, y lo trasladaron inmediatamente a los servicios sanitarios de Tarifa para recibir la asistencia médica necesaria.
Tras frustrar el intento de fuga, los tres niños fueron puestos bajo la tutela de una familia de acogida en la provincia de Cádiz, en un entorno seguro coordinado por los servicios sociales y con la supervisión de la Fiscalía de Protección de Menores.
Por su parte, los padres detenidos fueron trasladados a Madrid y puestos a disposición del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, que ha ordenado su ingreso en prisión provisional mientras se tramita su extradición a Países Bajos.
La rápida actuación de los agentes ha sido clave para proteger la integridad física de los menores y evitar su salida del país en una situación de extrema vulnerabilidad. El caso pone de relieve la eficacia de los mecanismos de cooperación internacional y los controles fronterizos para detectar casos de sustracción parental y maltrato infantil.
