El alcalde de Cádiz, José María González, ha sido el primero en intervenir en la inauguración del Congreso de la Lengua Española para dar la bienvenida a la ciudad, de la que ha ensalzado sus virtudes, y donde ha usado palabras muy arraigadas a la forma de hablar del gaditano para pedirle a los asistentes «que aprovechen la collá (oportunidad) para que cuando les toque ‘guasnajarse’ (irse) puedan decir que este congreso ha sido ‘un bastinazo’ (expresión, en esta ocasión, de admiración positiva)».
González ha sido el encargado de dar la bienvenida al Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE) cuyo acto de inauguración ha sido presidido por el Rey Felipe VI y la Reina Letizia, junto al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero; el director de la Real Academia Española (RAE) y presidente de la Asociación de Academias de la Lengua Española (Asale), Santiago Muñoz Machad, entre otros.
El alcalde se ha mostrado «muy contento» y ha asegurado que Cádiz acoge a los participantes «con ganas, ilusión, alegría y la hospitalidad afinada como ha ocurrido siempre a lo largo de su historia».
«Si tienen la oportunidad de recorrer y perderse por sus calles, lo comprobarán», ha invitado el alcalde, que ha señalado que «Cádiz tiene una luz distinta, especial, única, que alimenta los contrastes y las perspectivas, que se refleja en el mar donde se pierde nuestra orilla abriéndose a nuevas realidades, nuevos mundos, nuevas influencias, ese pozo de encuentros, de idas y vueltas que está en la esencia misma de nuestra identidad como ciudad».
Algo que según el alcalde, «también se refleja en su lengua, y por eso estamos aquí». «Hablamos con música, nombramos con historia, pronunciamos con rapidez y, sobre todo, nos reconocemos en las palabras que nos conectan con los pueblos americanos, con la civilización maya, con los gitanos o con el árabe», ha señalado.
Por ello, ha afirmado que «desde esa mirada diversa es un honor inmenso acoger para Cádiz el IX Congreso Internacional de la Lengua Española, lo cual no ha sido fácil, una tarea a contrarreloj para que esto hoy y aquí sea posible».