El Defensor del Pueblo considera cumplido el objetivo de facilitar una vivienda a los vecinos de Cerro del Moro

El Defensor del Pueblo Andaluz en funciones, Jesús Maeztu, se ha reunido con una representación de la plataforma de vecinos de la séptima fase de Cerro del Moro de Cádiz, a quienes les ha trasladado que aunque entiende «el desconcierto» de no ser propietarios en un futuro cercano de una vivienda en esta barriada, considera que «se ha cumplido el objetivo de facilitar el acceso a una vivienda digna» a los vecinos de esta promoción, «adaptadas a sus condiciones socioeconómicas».

Así lo ha trasladado en la reunión celebrada este jueves en la sede de la institución para atender su petición de darle a conocer su situación por la construcción de las 67 viviendas proyectadas en esta fase de intervención en la barriada gaditana, ha indicado en una nota la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz.

Tras escuchar a estos vecinos, encabezados por su portavoz, Enrique Estévez, el Defensor ha apreciado «falta de información por parte de la Junta de Andalucía hacia los afectados» en lo que concierne a las condiciones de acceso a una nueva vivienda en un proceso que «venía a poner fin a la rehabilitación integral de la barriada, que se inició en la década de los 90 y que se encontraba paralizado».

«Hubiera sido deseable que la administración hubiera informado a las familias con anterioridad a concretar la fuente de financiación de los términos de la misma», ha señalado Maeztu, una cuestión que trasladará a la Junta con la petición de que se mejore para «posteriores actuaciones».

En ese sentido, ha reiterado que «comprende el malestar de quienes se sienten diferenciados con respecto a los adjudicatarios de las anteriores fases, sobre todo, por los años que han de esperar para ser propietarios de las viviendas», pero que «por su experiencia» en procesos de rehabilitación de barriadas desarrolladas en fases que «se demoran mucho», es «prácticamente inevitable que se puedan mantener en el tiempo las mismas condiciones».

De esta manera, ha explicado que, por otras reclamaciones que tramita la Defensoría, son unos términos de financiación «en similares condiciones a las que se ofrecen actualmente a otros adjudicatarios de otras promociones de Andalucía que se acogen al mismo programa, siempre en aplicación de las normativas en vigor».

Tras concluir la reunión, el Defensor se ha comprometido con los vecinos a estudiar toda la documentación que ha solicitado a la administración o le han remitido los vecinos, y a pedirle a la Junta que «escuche las peticiones de los afectados», en otros aspectos que «aún quedan pendientes» del proceso de tramitación de esta fase para «aclarar sus dudas y valorar las mejores condiciones posibles en la oferta final».

En la misma línea, con respecto a la situación en el caso de renunciar a la adjudicación y permanecer en sus viviendas actuales, el Defensor ha insistido en «la máxima transparencia e información», y ha recordado que esta Defensoría se ha interesado «en numerosas ocasiones en los últimos años» por la remodelación del barrio, con visitaas a la zona y reuniones con las autoridades responsables de la programación y ejecución de las obras.

En todas las ocasiones su labor ha sido la de «impulsar y agilizar los pasos», sin entrar en los detalles técnicos de la actuación, y exigir la colaboración institucional en beneficio de las necesidades de la ciudadanía para desbloquear un proceso «que se estaba demorando».

Una intervención que, como ha recordado Jesús Maeztu, «fue un compromiso personal para que se hiciera justicia con este barrio, aunque tardía, y donde mi trabajo ha sido, como siempre, impulsar y mediar entre las administraciones, en este caso local y regional, para desbloquear una actuación que estaba paralizada, sin participar en la negociación de las condiciones, que no es el cometido de esta Defensoría, pero exigiendo en todas las reuniones el derecho de estas familias de acceder a una vivienda atendiendo a su situación económica y social».