El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), en colaboración con la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA) y la Dirección General de la Marina Mercante, realizarán una segunda campaña para comprobar la efectividad de los drones en el control de emisiones contaminantes procedentes de los buques y en el apoyo a las emergencias marítimas en El Estrecho de Gibraltar, a partir de este mes de julio y hasta finales de octubre, tal y como ha informado el propio Ministerio en una nota.
Según han indicado, el servicio de dron de la EMSA, denominado RPAS (Remotely Piloted Aircraft Systems), ha regresado por segunda vez a El Estrecho con una misión múltiple: por un lado, detectará posibles emisiones de óxidos de azufre por encima de los límites establecidos (no puede superar el 0,50% en masa), relativo a la prevención de la contaminación atmosférica. Por otro lado, el dron tendrá nuevas tareas, como el apoyo a los servicios de emergencia que realiza Salvamento Marítimo en esta zona, han explicado.
En este sentido, el dron tiene varias características que lo convierten en una herramienta muy útil para el control de emisiones de azufre y el apoyo a las emergencias de Salvamento Marítimo, incluyendo su capacidad de despegar y aterrizar en un área menor de 25 metros cuadrados, una duración de vuelo de más de seis horas, un rango de operación de más de 100 kilómetros y una altura máxima de vuelo de 3.650 metros, han indicado. Gracias a la colaboración del Ministerio de Defensa, el dron operará en una posición privilegiada desde la que «podrá controlar todo el tráfico de salida del Mar Mediterráneo».
Los servicios de inspección de las Capitanías Marítimas, dependientes de la Dirección General de la Marina Mercante, llevaron a cabo durante 2021 un total de 1.523 inspecciones relacionadas con el contenido de azufre de los combustibles marinos utilizados por los buques mercantes y en 332 de ellas se realizaron análisis de muestras, objetivos muy superiores a los exigidos por la Comisión europea, que ascendían a 1.043 inspecciones y 312 análisis en este periodo.
Según ha calculado el Ministerio, durante la campaña realizada en 2021 por el dron de EMSA, se midieron las emisiones de 339 buques y 31 de ellas se notificaron a los puertos de destino para confirmar una posible infracción en los niveles de emisión de óxido de azufre.
En la actualidad, España es uno de los países europeos más comprometidos con el control de la seguridad y la prevención de la contaminación en el mar, como ha recordado el director general de Marina Mercante, Benito Núñez, que también ha expresado su agradecimiento a la EMSA por la confianza demostrada al conceder un nuevo proyecto de uso del dron.
Por último, ha destacado que la «Organización Marítima Internacional (OMI) ha aprobado en la última reunión de su comité para la preservación del medio ambiente marino la designación del Mar Mediterráneo como un Área de Control de Emisiones de Azufre (zona ECA)». El Ministerio ha explicado, respecto a esto, que en 2025, cuando se espera que entre en vigor la medida, todos los buques que naveguen por el Mediterráneo deberán utilizar un combustible marino con un contenido de azufre del 0,10% en masa, en lugar del 0,50% actual.