El secretario general del PSOE de Cádiz, Juan Carlos Ruiz Boix, ha expresado su indignación ante lo que considera una «doble cara» del Partido Popular (PP) respecto a los intereses del Campo de Gibraltar. Ruiz Boix ha criticado duramente al PP por mantener discursos distintos en la comarca del Campo de Gibraltar y en las esferas políticas de Sevilla y Madrid, especialmente en relación con el conflicto laboral en Acerinox y el acuerdo con Gibraltar.
Ruiz Boix ha destacado dos incidentes recientes que ilustran esta incongruencia. En primer lugar, mencionó el voto en contra del PP en el Senado sobre una propuesta relacionada con Gibraltar y la postura «incongruente» del senador popular José Ignacio Landaluce. En segundo lugar, se refirió a la ausencia de miembros del PP, particularmente las parlamentarias Pilar Pintor y Susana González, en la Comisión de Industria del Parlamento andaluz, donde los trabajadores de Acerinox acudieron para explicar su situación tras 120 días de huelga.
«Teóricamente, aquí en la comarca acuden a manifestaciones y concentraciones para dar palmadas en la espalda a los trabajadores. Sin embargo, en la comisión de Industria del Parlamento andaluz, los 58 diputados del PP brillaron por su ausencia, por mandato del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, ante el principal conflicto laboral de Andalucía», declaró Ruiz Boix.
El secretario general del PSOE de Cádiz también exigió explicaciones al CEO de Acerinox, Fernando Gutiérrez, por un reciente comunicado de la empresa que ha generado rechazo entre los vecinos del Campo de Gibraltar. Ruiz Boix criticó la intención de la empresa de recortar empleo a pesar de haber obtenido los mejores resultados financieros de su historia en 2023. «No lo podemos permitir. Hay que pararles los pies a estas empresas insolidarias», subrayó.
Ruiz Boix manifestó su preocupación por la aparente falta de carga de trabajo en Acerinox, especialmente en un contexto de crecimiento económico en España y Europa. «Hay algo oscuro, hay algo oculto que nos tienen que explicar. Después de 120 días de huelga, de cuatro nóminas sin cobrar para más de 2.000 trabajadores directos y 1.000 empleos indirectos, no es lógico que se hable de un recorte de empleo en más de 500 personas», afirmó.
Finalmente, Ruiz Boix pidió «responsabilidad institucional» a Fernando Gutiérrez y a los responsables políticos que han colaborado con Acerinox en la concesión de ERTEs y otros incentivos industriales. «Hay una amenaza real de pérdida de más de 500 puestos de trabajo, incompatible con haber recibido subvenciones que aseguraban el mantenimiento del empleo», concluyó, instando a las partes a alcanzar un acuerdo.