Escuelas Católicas de Andalucía expresa su enorme satisfacción por la aprobación de la Junta de Andalucía que permite que las escuelas-hogar reciban el 70% de las ayudas sin justificación previa. Esta decisión representa una victoria para la organización, que ha luchado incansablemente por esta modificación desde que se implementó la Orden de abril de 2020, que modificó la periodicidad en los pagos a estas instituciones.
Rafael García Porras, secretario general de Escuelas Católicas de Andalucía, destaca la importancia de esta excepción en la justificación previa, especialmente considerando las situaciones familiares de especial gravedad que enfrentan los alumnos atendidos por las escuelas-hogar. Esta medida beneficia a 23 escuelas-hogar en toda Andalucía, que cuentan con un total de 1.643 plazas subvencionadas.
La organización ha luchado por esta reivindicación desde que se conoció la Orden de abril de 2020, que establecía que el 50% del total de la subvención se recibiría después de la justificación. «Nuestras alegaciones a dicha orden han resultado fundamentales para que la Junta de Andalucía atendiera finalmente esta modificación», señala García Porras.
El alumnado atendido por las escuelas-hogar enfrenta situaciones familiares difíciles, como la tutela de un miembro en un centro penitenciario, largas temporadas fuera de su lugar de residencia por motivos laborales, y dificultades sociales extremas. Estas escuelas-hogar son esenciales para brindar atención integral a estos alumnos, contribuyendo significativamente al servicio público proporcionado por las residencias escolares.
Aunque se celebra el avance, Escuelas Católicas de Andalucía seguirá luchando por revisar los módulos e incrementar el presupuesto para las escuelas-hogar, que se ha mantenido prácticamente inmutable en los últimos diez años, según García Porras.
Escuelas Católicas de Andalucía representa el 70% de la educación concertada en la región, con 400 centros, 16,000 profesionales y más de 260,000 alumnos.