FACUA Cádiz denuncia la celebración de una peregrinación religiosa en el Hospital San Carlos
La organización cuestiona la idoneidad de actos religiosos en un centro público y critica la gestión del gerente del Hospital Puerta del Mar
FACUA Cádiz ha denunciado públicamente la celebración prevista para el próximo 28 de junio de una peregrinación religiosa en el Hospital San Carlos de San Fernando, dependiente del Hospital Puerta del Mar de Cádiz. Según el secretario general de FACUA Cádiz, Jesús Yesa, esta iniciativa, auspiciada por la gerencia del centro, representa una falta de respeto hacia las reivindicaciones ciudadanas y cuestiona la gestión del actual gerente, José Luis Guijarro.
Yesa ha señalado que la coincidencia de esta peregrinación con las movilizaciones en defensa del hospital y su actividad “parece indicar que solo queda elevar plegarias para que se atiendan las demandas del cierre anunciado”. La organización critica que, desde la llegada de Guijarro, se ha incrementado la presencia de actos religiosos católicos en el Hospital Puerta del Mar, destacando exposiciones y peregrinaciones previas en el propio centro.
El secretario general de FACUA Cádiz ha expresado su incredulidad ante el hecho de que el gerente de un hospital público “parezca dirigir una cofradía en lugar de un centro sanitario”. Además, ha recordado que bajo esta gerencia se eliminó la comisión de participación ciudadana que permitía a FACUA y otras organizaciones dialogar con la dirección y defender los derechos de los usuarios. En este sentido, Yesa denunció que la organización fue expulsada del hospital cuando informaba a los pacientes sobre sus derechos, lo que llevó incluso a la intervención policial.
Para FACUA Cádiz, los hospitales públicos deben respetar el principio de laicidad establecido en la Constitución, evitando que sus instalaciones se conviertan en espacios de manifestación de una confesión religiosa concreta. Yesa advierte que la realización de actos religiosos institucionalizados vulnera la separación entre administración pública y creencias y puede generar sensación de exclusión entre pacientes y personal que no comparten esas convicciones.
Además, el secretario general subraya que la sociedad actual es plural y diversa, y un hospital público debe ser un espacio inclusivo y seguro para todas las personas, independientemente de sus creencias. La proliferación de actos religiosos específicos en estos centros puede incomodar o marginar a quienes no profesan dicha fe.
Finalmente, FACUA Cádiz considera inapropiado que estos actos impliquen un coste económico para el hospital, especialmente ante la grave situación que atraviesa el sistema sanitario público andaluz, y reclama que se prioricen los recursos en la mejora de la atención sanitaria y no en actividades de índole religiosa.
