En Alhaurín el Grande posibilitan que el operativo ciudadano de fabricación de mascarillas amplíe su ámbito territorial
Los Agentes de Medio Ambiente de Andalucía continúan incorporándose a las cadenas de solidaridad que surgen por el territorio como consecuencia de la pandemia de Covid-19. De esta forma, a la labor que vienen desarrollando en la atención a las personas que residen en viviendas aisladas en el campo y la sierra de las ocho provincias y las funciones que realizan en el transcurso de las operaciones de desinfección contra la expansión del COVID-19 a través del Plan INFOCA, se une ahora su colaboración en iniciativas de colectivos sociales que aportan de forma desinteresada su granito de arena en esta crisis sanitaria.
Es el caso de los agentes de Medio Ambiente que operan en el entorno de Alhaurín el Grande, en Málaga. Allí, tres vecinas pusieron en marcha una iniciativa de trabajo en red en la que ya participan 62 personas, hombres y mujeres, además de instituciones y empresas de la localidad. Se trata de la fabricación de mascarillas, tarea que pusieron en marcha alertadas por la falta de este material sanitario imprescindible en muchos sectores en la actualidad. Con la colaboración del Ayuntamiento, que proporcionó grandes cantidades de tela, se pusieron manos a la obra corriéndose la voz por todo el pueblo y produciéndose una reacción en cadena que llevó a un primer objetivo de 10.000 mascarillas en las que se trabaja en la actualidad.
Al mismo tiempo, la implicación del consistorio sigue siendo fundamental al poner a disposición de esta acción todos sus medios disponibles, lo que ha resultado determinante para cuestiones fundamentales como la distribución y recogida del material entre las más de medio centenar de viviendas que participan. Pero también hay empresarios del pueblo, como la empresa de confección que se está encargando de todos los cortes de la tela o la tintorería, gracias a la cual se distribuyen con unas garantías de higiene y salubridad.
Estas mujeres son las encargadas de coordinar el operativo al que todos están dedicando buena parte de su tiempo, si bien ellas advierten que este esfuerzo, que compaginan con su teletrabajo, debe ser, en la medida de lo posible, anónimo y gratuito.
Alhaurín ha enviado ya mascarillas a los hospitales de Málaga y a los centros de salud cercanos, a miembros de los cuerpos de seguridad y a los propios agentes de Medio Ambiente, empresas agroalimentarias del municipio, profesionales de las farmacias y colectivos vulnerables.
Pero faltaba un último eslabón en esta cadena y no es otro que poder llegar a entidades y personas más alejadas de los núcleos de población y en zonas montañosas. Es aquí donde entran en juego los agentes de Medio Ambiente del entorno de Alhaurín, que han empezado también a colaborar, pues en ellos se reconoce su mejor conocimiento del territorio, su fácil acceso a zonas de mayor dificultad y su vocación de servicio. Esta acción se inició con un primer envío de mascarillas para la Residencia para mayores Fuentesol, que se encuentra retirada de la población de Alhaurín.
La movilización ciudadana como consecuencia del Covid-19 es capaz de vencer barreras tan complicadas como el distanciamiento social llegando paradójicamente a los lugares más distantes.