La formación, de carácter gratuito y dirigido por la poeta Rosa Lesca, se celebrará el próximo 2 de marzo
La Casa de Iberoamérica, gestionada por la sociedad Cádiz 2012, organiza el próximo 2 de marzo, a las 11.00 horas, un taller destinado a la población adulta para recuperar el gusto por la escritura de cartas. Recuperar el gusto por escribir a mano, por las manchas de tinta en los dedos, por el tacto del papel y por la emoción de abrir el buzón de casa y encontrar otros sobres que no sean recibos del banco, son algunos de los objetivos de esta iniciativa.
El taller -que durará dos horas- está dirigido por la poeta Rosa Lesca, comisaria de la exposición Te Escribiré Siempre que está abierta en la Casa de Iberoamérica hasta el 7 de mayo. Esta muestra rescata, precisamente, esa amistad por carta que mantuvieron durante más de tres décadas el poeta portuense Rafael Alberti y el artista argentino León Ferrari, a raíz de su encuentro en el exilio del primero, en Argentina.
La formación que impartirá Rosa Lesca está basada en la correspondencia como género, partiendo de la obra Cartas a un joven poeta, de Rainer Maria Rilke. Este libro, editado en 1929 en Leipzig (Alemania) recopila diez cartas que el célebre autor austriaco escribió a otro joven poeta desconocido, Franz Xaver Kappus. En esas misivas, Rilke habla -con un lenguaje de extremada belleza y claridad- de lo que opina sobre el arte, pero también de otras cuestiones como el amor, la soledad y la muerte.
El taller está dirigido al público adulto en sentido general. No es necesario conocimientos previos literarios ni de otro tipo. Tan solo tener curiosidad y amor por las letras, la literatura o el conocimiento en general.
La inscripción puede realizarse enviando un correo electrónico a la siguiente dirección: smcadiz2012@cadiz.es o en el teléfono 956 288296, en horario de lunes a viernes, de 8.00 a 15.00 horas.
Como dato curioso, en la exposición sobre Alberti y Ferrari abierta ahora en la Casa de Iberoamérica existe la posibilidad de enviar una postal a un amigo o amiga o ser querido, depositándola en el buzón de la sala. La postal es precisamente la imagen de unas de las cartas que el autor de ‘La arboleda perdida’ le envió a su amigo León. El personal de la Casa de Iberoamérica se encargará de hacerla llegar a su destino.