La Chirigota ‘Apartamentos Turísticos Juani Wainjaus’ brilla con su humor ingenioso pero no logra cautivar al público en semifinales del COAC 2025
La Chirigota ‘Apartamentos Turísticos Juani Wainjaus’ dejó una actuación llena de humor ingenioso y críticas afiladas en las semifinales del COAC 2025, pero no consiguió enganchar completamente al público del Gran Teatro Falla. Dirigida por José Luis García Cossío, ‘Selu’, la chirigota presentó a su personaje principal, Juani Wainjaus, una figura caradura e hipócrita que dirige un apartamento turístico con su peculiar estilo.
Aunque la actuación mejoró respecto a ediciones anteriores, no logró la misma conexión con el público que en ocasiones pasadas. Juani Wainjaus, interpretada con carisma, fue la base del tipo de la chirigota, pero el desarrollo de la idea no acabó de atrapar a la audiencia.
En los pasodobles, el primero criticó los datos personales que los hoteles exigen a los huéspedes, haciendo especial énfasis en los turistas británicos y su comportamiento, aunque la parte sobre los okupas no tuvo tanto impacto. El segundo pasodoble relató con humor ácido la vida de la protagonista con su exmarido y su suegra, cerrando con un giro final sobre la ruina económica de su esposo.
Los cuplés destacaron por su ironía y creatividad. El primero presentó un gag sobre un rapero empotrado, logrando una risa genuina, mientras que el segundo cuplé fue una respuesta irónica a Hacienda, donde las protagonistas, tras ser acusadas de fraude, respondieron con humor, afirmando que no pueden “caer bien en todos lados”.
El popurrí, aunque comenzó con algunos momentos simpáticos, resultó algo descompensado en su desarrollo. Algunas cuartetas hicieron reír, pero otras dejaron la risa en suspenso, generando una actuación desigual. Aunque Selu continuó apostando por el desarrollo del personaje de Juani, no logró la misma identificación ni atractivo que en otros años con personajes anteriores.
En términos generales, la actuación de la chirigota fue destacable por su humor constante y los golpes ingeniosos, aunque no alcanzó el nivel de las mejores presentaciones. A pesar de su crecimiento evidente en comparación con años pasados, no logró enganchar completamente con el público. El popurrí fue el punto más flojo de la actuación, con altibajos en cuanto a la recepción. Sin embargo, la chirigota mantiene su energía y dinamismo, siendo una propuesta divertida a pesar de no ser su mejor año.
