La Diputación de Cádiz, a través de su delegación de Bienestar Social, ha decidido adoptar una serie de medidas para hacer frente al coronavirus, entre las que destaca el refuerzo del personal que trabaja en las dos residencias que gestiona en la provincia, la de la Calle Zarza, en El Puerto de Santa María y la de la calle Matía Calvo en Cádiz. Entre ambos centros suman 120 residentes, sin que hasta el momento se haya registrado ningún caso positivo de COVID-19.
La principal medida ha sido la contratación de más personal en un momento en que es necesario extremar las medidas de precaución y que los mayores estén perfectamente atendidos cumpliendo a rajatabla los protocolos de seguridad ante la epidemia. Las contrataciones han consistido en la incorporación de doce profesionales entre ambos centros: cuatro diplomados en enfermería, cuatro gerocultores, y cuatro de personal asistente, ASES. Se están gestionando más contrataciones para su incorporación en breves fechas.
Además, dentro de las dificultades a nivel global para adquirir equipos de protección individual, EPI, se ha aportado una remesa para cubrir al menos los próximos días con garantías de seguridad por parte del diputado de Bienestar Social, David de la Encina.
Por otro lado, desde la Diputación también se van a proponer nuevas pautas de trabajo para el personal de la residencia. A sugerencia de los sindicatos, desde la dirección de cada centro se va a procurar implementar en consenso con las plantillas turnos denominados «dobletes» para reducir las entradas y minimizar riesgos.
Además, el diputado de Bienestar Social, David de la Encina, ha podido verificar que los centros que gestiona la Diputación se adecúan a lo que el Boletín Oficial del Estado ha publicado específicamente sobre medidas para las residencias de mayores en esta crisis sanitaria.