Los resultados del muestreo realizado por los técnicos del Centro de Prevención de Riesgos Laborales de Cádiz concluyen que el 52% de las mediciones de temperatura dieron resultados por debajo del mínimo establecido en la normativa y el 74% de las de humedad por encima del máximo
En respuesta a la denuncia realizada por Comisiones Obreras en la que se pedía a la Inspección de Trabajo de Cádiz que actuase ante las bajas temperaturas a las que se estaban viendo sometidos los trabajadores de los centros educativos durante la ola de frío que asoló la provincia a principios de enero, este servicio requirió a la Delegación Territorial de Educación y Deporte diversa documentación y visitó 10 centros para medir la temperatura y humedad en las Aulas.
El resultado de las mediciones, que se realizaron cuando la ola de frío ya había pasado, ya que se comenzaron a realizar a partir del 27 de enero, indica que en más de la mitad de los centros la temperatura estaba por debajo de los 17 grados centígrados que se establecen como temperatura mínima para poder trabajar en las aulas y más de dos tercios por encima del 70% en el caso de humedad, tal y como aparece en el R:D: 486/1997.
Sobre esta cuestión, el Secretario General del Sindicato de Enseñanza de CCOO de Cádiz, Sebastián Alcón, señala “pese a que el muestreo se realizó cuando ya las temperaturas mínimas habían subido prácticamente 10 grados las temperaturas estaban por debajo de lo establecido en la norma, lo que nos da la razón en nuestra petición de que se hubieran suspendido las clases durante la ola de frío”.
En este sentido, CCOO, señala como enormemente grave la situación que se está viviendo en las aulas andaluzas ante la actual pandemia e insta a la Consejería de Educación a que acometa de una vez la adecuación de los centros educativos públicos andaluces para que el confort térmico de los mismos permita a alumnos, docentes y personal de servicios trabajar en condiciones de seguridad para su salud.
Así, Alcón recuerda que “el protocolo anti-COVID obliga a mantener las aulas abiertas y ventiladas, pero esto no puede ser una excusa para que las personas que diariamente trabajan y estudian en los centros sean sometidos a situaciones que pongan en peligro su salud.”.
Además, CCOO recuerda que este no es un problema puntual del invierno. “Aparte de que en muchas zonas de nuestra geografía el invierno es largo, cuando llega la primavera y el verano nos vemos inmersos en la situación contraria, trabajando en aulas en las que se supera en mucho las temperaturas máximas.
“Ante este nuevo atropello a la educación pública andaluza, CCOO exige a la Consejería de Educación adecuar los centros para que ni en invierno pasemos frío ni en verano nos asemos de calor”, finaliza Alcón.