La Junta invierte casi 125.000 euros en el acondicionamiento del Camino de Las Arenillas en Castellar

La Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía está ejecutando una inversión cercana a los 125.000 euros destinada al acondicionamiento del Camino Rural de Las Arenillas, ubicado en el término municipal de Castellar de la Frontera. Los trabajos, gestionados a través de la empresa Tragsa, abarcan más de un kilómetro y buscan mejorar la infraestructura rural para potenciar el desarrollo agrario y la fijación de población en la zona.

Entre las labores realizadas destacan el desbroce de los márgenes, la reconstrucción y perfilado de cunetas, la limpieza mecánica de terreno suelto, y la reparación o construcción de obras de drenaje y pasos salvacunetas. Además, se está realizando el escarificado, riego y compactado del firme, junto con el refuerzo de la capa base mediante material granular tipo zahorra (ZA-20). El proyecto incluye también la señalización adecuada para garantizar la seguridad y funcionalidad del camino.

El subdelegado del Gobierno, Javier Ros, y el delegado territorial de Agricultura, Francisco Moreno, han subrayado la importancia de esta actuación, que se enmarca en el Plan Itínere Rural. Este programa tiene como objetivo mejorar la red de comunicaciones rurales para dinamizar el tejido productivo agrario y fomentar la permanencia de la población en el territorio.

Ros y Moreno explicaron que los caminos rurales son infraestructuras esenciales para asegurar la productividad de las explotaciones agrícolas, ya que facilitan el acceso de trabajadores, insumos y maquinaria, así como la salida de la producción en condiciones óptimas. Además, estos caminos permiten el tránsito seguro de personas y vehículos, aspectos clave para el desarrollo rural sostenible.

El estado de conservación de las vías rurales es, por tanto, una prioridad para la Junta de Andalucía, debido a su impacto directo en la rentabilidad y capacidad productiva del sector agrícola local. La mejora de estas infraestructuras contribuye no solo a la economía rural sino también al bienestar social de las comunidades vinculadas a la agricultura.