El último ejercicio se cierra con 23,5 millones de euros de superávit y un remanente de tesorería de 44,2 millones de euros
Diputación dispone de recursos económicos para financiar nuevos programas de inversión y empleo para los 45 municipios de la provincia de Cádiz. La liquidación del presupuesto de 2019 confirma esta liquidez: el último ejercicio se cierra con un superávit consolidado de 23,5 millones de euros y el remanente de tesorería para gastos generales se cifra en 44,2 millones de euros. Estos índices acreditan la solvencia de Diputación para promover nuevas iniciativas que contribuyan a la recuperación de la provincia gaditana tras los estragos económicos, laborales y sociales de la pandemia.
La presidenta de la Diputación de Cádiz, Irene García, convocará en los próximos días a todos los ayuntamientos de la provincia: a los 40 que conforman el Consejo de Alcaldías, en representación de los municipios con menos de 20.000 habitantes y entidades locales autónomas, así como a los de poblaciones con más de 20.000 habitantes. En estos foros precisará el alcance y la dotación presupuestaria de los nuevos programas que activará Diputación.
Nuestra prioridad siempre ha sido dedicar todos los recursos disponibles a los ayuntamientos de la provincia de Cádiz. Esa voluntad ahora se refuerza, a tenor de las circunstancias tan complicadas, con la reinversión que la ley nos permite, en nuevos programas de inversión y ayudas sociales, ha destacado Irene García.
Desde la declaración del estado de alarma Diputación ha movilizado más de trece millones de euros canalizados en diferentes intervenciones públicas: adquisición de equipos de protección individual, refuerzos de personal y dos campañas provinciales de desinfección; la aprobación del acuerdo marco del programa DipuActiva; la sexta edición del Plan de Cooperación Local; y un plan de ayudas sociales extraordinarias. A esta relación se le unirán las actuaciones financiadas con los fondos procedentes de la liquidación de 2019.
La solvencia económica de Diputación se confirma con otros ratios que depara el último ejercicio económico: la deuda viva es decir el importe de los préstamos pendientes y su valor relativo en relación a los ingresos corrientes- es del 33%, cuando hace sólo cinco años se elevaba al 103% (en el año 2018 ya había bajado al 56%); y el ahorro neto, que mide la diferencia entre derechos liquidados y obligaciones reconocidas, es del 20%, un registro que permite concertar créditos para operaciones a largo plazo si fuera necesario. El periodo medio de pago a proveedores de bienes y servicios, en diciembre de 2019, se situó en 19 días.
Los gastos de Diputación en 2019, computables para medir el cumplimiento de la regla de gasto, se cifraron en 191,4 millones de euros. Esta cifra rebasa ligeramente el límite determinado para dicho ejercicio, que se situaba en 187,5 millones de euros. Para compensar este desajuste Diputación tendrá que aprobar un plan económico financiero, conforme a las directrices de la Ley Orgánica 2/2012 de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera. Superamos ese límite con un solo objetivo: movilizar el mayor volumen posible de recursos en beneficio de los pueblos y ciudades de la provincia de Cádiz, ha explicado Irene García. El presupuesto diseñado para 2019 tuvo un grado de ejecución del 77% de los capítulos de gastos y del 75% de los de ingresos.
Hasta el momento Diputación, con los gobiernos presididos por Irene García, ha logrado financiar cuatro ediciones del Plan Invierte tras aplicar excedentes presupuestarios. Esta iniciativa ha cubierto actuaciones financieramente sostenibles que eran las únicas admitidas en el actual marco normativo- para todos los ayuntamientos de la provincia de Cádiz.
El Gobierno de España en el Real Decreto Ley 8/2020, con motivo de la crisis del COVID-19, abrió la posibilidad de destinar el 20 por ciento del superávit presupuestario a gastos sociales. La Diputación de Cádiz reclama desde hace años la libre disposición de superávit y remanentes.