La última barbacoa con motivo del Trofeo Carranza celebrada en la noche del sábado al domingo contó con la presencia de una media de en torno a las 17.000 personas, contándose la mayor afluencia sobre las 2:00 horas de hoy domingo con unas 25.000 personas. El evento dejó 12,7 toneladas de basura en la playa que recogieron los 210 operarios de limpieza que conformaban el dispositivo especial y que dejó la zona acotada para estas barbacoas (entre los módulos 3 y 6) limpia a 8:00 horas.
La noche de las barbacoas se desarrolló con mayor presencia que otros años de personas en la playa. Además, los asistentes se concentraron en una zona menor de La Victoria, ya que pese a que estaba permitido entre los módulos 3 y 6, la mayor parte de los participantes estaban concentrados entre el módulo 3 y 4, en una superficie total de 17.680 metros cuadrados (a una media de algo menos 1,5 personas por metro cuadrado en el momento de máxima afluencia y de menos de una persona por metro cuadrado de media).
Durante la noche, las 25 personas que formaban el dispositivo de seguridad atendieron 62 incidencias, de ellas 46 en el módulo central. La mayoría de estas intervenciones se debían a comas etílicos por consumo de alcohol, todas ellas de menores, y para realizar lavados oculares por presencia de cuerpos extraños motivados por el fuerte viento.
El único incidente reseñable que se ha producido durante el desarrollo de estas actividad tuvo lugar sobre las 5:30 horas, cuando un menor con domicilio de Jerez se negó a abandonar la playa y acabó agrediendo a uno de los 65 agentes de la Policía Local del dispositivo especial para las barbacoas, por lo que se han abierto diligencias por un presunto delito de resistencia y atentado a la autoridad.
A las 6:00 horas comenzaron las labores de limpieza a cargo de los 210 operarios previstos (con 10 tractores y dos máquinas limpia playas). El concejal de Medio Ambiente y Playas, Manuel González Bauza, resalta que estas labores “este año concluyeron antes y con menos desperdicios recogidos debido a la menor afluencia de público”. Así, a las 8.00 la playa estaba ya limpia y con las bolsas de basura dispuestas para su traslado, tras haberse recogido 12,7 toneladas de basura, 9 menos que el pasado año. De este modo, a las 11:00 horas los servicios de playa abrieron con total normalidad como cualquier día.
Como en otros años, desde la Delegación de Medio Ambiente se han encargado analíticas de arena y agua para comprobar el estado en el que quedó la playa tras este evento.
Destacar la participación de los 50 voluntarios del movimiento vecinal que durante la tarde repartieron 5.000 ceniceros ecológicos y 3.000 bolsas de basura entre los asistentes a las barbacoas para cuidar al máximo la playa, labor que agradece y destaca el Ayuntamiento.