La adquisición de un georradar multicanal y multifrecuencia, un magnetómetro de 16 canales, un escáner láser terrestre 3D de largo alcance y un moderno equipo de mapeo de suelo, aumentará exponencialmente los servicios del Laboratorio de Historia del IVAGRO
La Universidad de Cádiz cuenta con una de las unidades de Geodetección del Patrimonio Histórico-Arqueológico mejor equipadas de España debido a la adquisición de una serie de nuevos equipos de última generación que poseen una amplia capacidad para la exploración de grandes superficies, así como de generar modelos tridimensionales y nubes de punto de los elementos naturales y artificiales del subsuelo ligados a las ocupaciones históricas, además de georreferenciar toda la información, susceptible por tanto de integrarse en los análisis de metodología GIS (siglas en inglés de Sistema de Información Geográfico).
Esta importante dotación instrumental se ha llevado a cabo gracias a la ayuda concedida dentro del subprograma estatal de Infraestructuras de Investigación y Equipamiento Científico-Técnico (Plan Estatal I+D+i 2017-2020) correspondiente al año 2018, y se ha centrado en cuatro equipo que complementa de forma importante al ya existente en el Laboratorio de Historia, integrado en el Instituto de Investigación Vitivinícola y Agroalimentaria (IVAGRO).
El rector de la UCA ha resaltado que “este acto de presentación de los nuevos equipamientos de la Unidad de Geodetección reafirma la diversidad y potencialidad del Campus de Jerez, en particular, y de la Universidad de Cádiz en su conjunto”. Unos recursos tecnológicos “de última generación que nos colocan a la vanguardia en nuestro entorno nacional y europeo” con los que la Universidad de Cádiz “refuerza su liderazgo en este ámbito” que permite la exploración de grandes superficies, así como de generar modelos tridimensionales sin necesidad de hacer prospecciones a ciegas, siendo más sensibles y cuidadosos con el patrimonio y su entorno”.
Además, Francisco Piniella ha aprovechado el acto para poner en valor el trabajo de las personas que integran el Laboratorio de Historia de la UCA. “Si nos hemos colocado en posición de liderazgo, no ha sido por casualidad. Hay detrás mucho estudio, mucha cualificación, mucho compromiso y, sobre todo, muchas horas de esfuerzo de personas con nombre y apellidos. La suerte se trabaja. El futuro es una construcción. Es el caso de nuestro catedrático y responsable de la Unidad de Geodetección Lázaro Lagóstena”.
Por su parte, la vicerrectora de Política Científica y Tecnológica de la UCA ha señalado que “además de por los estudios en los ámbitos marino y marítimo , caso del CEIMAR”, la Universidad de Cádiz suma otras muchas potencialidades en los ámbitos vitivinícola y la agroalimentación y, dentro del IVAGRO, sobresalen los estudios en arqueología que “son tan importantes para nuestro entorno”. En este sentido, ha subrayado que “el esfuerzo de todo este equipo ha generado también transferencia que normalmente es más complicada en los campos de las Humanidades”, alcanzando “unas cifras inimaginables, como los 30 contratos OTRI de este año, así como el millón y medio de euros en infraestructuras conseguidos en los tres últimos años”
Para Lázaro Lagóstena, el servicio periférico de geodetección del patrimonio y el laboratorio de investigación puesto en marcha cuenta con un instrumental que “no existe en ningún grupo de investigación no ya de Humanidades sino de otras áreas en todo el país ya que es capaz de explorar diez hectáreas en una jornada de trabajo gracias a su gran capacidad de barrido. Es un salto cualitativo enorme porque nos dedicamos también al estudio del territorio y el paisaje y estos equipos tienen la capacidad de recrear tridimensionalmente con un kilómetro de alcance”. Del mismo modo, ha destacado que los trabajos “se están realizando por todo el país y parte del extranjero y que estamos dando servicio desde la Universidad de Cádiz con este tipo de técnicas. Un trabajo con el que estamos haciendo marca UCA”.
Entre los nuevos equipos destaca la adquisición de un georradar multicanal y multifrecuencia de última generación que se sumará a los ya disponibles por la Unidad. Este innovadora tecnología step frequency o multifrecuencia, multiplica su potencial de detección de vestigios enterrados y ofrece una mejor definición de los restos documentados. De igual forma, este georradar puede generar imágenes 3D de la exploración realizada y consta de una antena de 2,40 metros de anchura, además de tener la capacidad de explorar grandes superficies por jornada de trabajo y poder adaptarse a una gran variedad de terrenos, ya sean urbanos y/o rurales.
Asimismo, la Universidad de Cádiz cuenta con un innovador magnetómetro multicanal de 16 canales, un equipo capaz de detectar elementos subterráneos gracias a la medición de las variaciones del magnetismo terrestre. Este magnetómetro, igualmente con gran capacidad de exploración superficial, modulable y susceptible de ser usado de manera manual o motorizada en todo tipo de terrenos, constituirá un complemento esencial para las exploraciones realizadas con el georradar ya que contribuirá a una mejor interpretación de los vestigios arqueológicos debido a su capacidad para detectar elementos sometidos a cambios en su magnetismo, como son las áreas de combustión (hornos, enterramientos por incineración, etc.) o el empleo de materiales constructivos en cuya fabricación ha intervenido procesos capaces de alterar sus cualidades magnéticas.
Por otro lado, la Unidad también tiene a su disposición un nuevo escáner láser terrestre 3D de largo alcance, un equipamiento último modelo en tecnología LIDAR (acrónimo de Light Detection and Ranging, es decir, detección por luz y distancia) terrestre que permite obtener modelos virtuales del espacio, ya sean de territorio o elementos edilicios (relacionados con edificios o construcciones), con capacidad de alcanzar hasta un kilómetro a la redonda del punto de toma de datos. Este equipo de gran capacidad permite construir modelos tridimensionales del territorio e integrar los resultados de otros equipos como georradares y magnetómetros. Su empleo en la interpretación de los resultados de la investigación no invasiva su une a su utilidad para la modelización y el estudio del paisaje y el territorio histórico.
Finalmente se ha adquirido también un moderno equipo de mapeo de suelos, empleado tanto en agricultura de precisión como en arqueología, ya que permite medir al mismo tiempo la conductividad eléctrica del suelo, su pH y la materia orgánica contenida, datos que ofrecen indicadores de usos y ocupaciones históricas del territorio, generando mapeos complementarios al resto de los equipos de investigación.
Estos equipos, cuyo responsable científico-técnico es el catedrático en el departamento de Historia, Geografía y Filosofía de la UCA Lázaro Lagóstena, están dotados de elementos complementarios como los topográficos, GPS centimétricos o estación total robotizada, entre otras cosas. Asimismo, es importante indicar que además de ellos, la Unidad de Geodetección de la Universidad de Cádiz contará con remolques y vehículos para el transporte y trabajo de campo de nueva adquisición, ya que forman parte de la dotación conseguida.
Todo ello, unido al georradar StreamX, de dos metros de ancho de barrido e impulsado con vehículo motorizado, un equipamiento singular y único en Andalucía que posee gran capacidad de exploración, y que hace exploraciones en tres dimensiones y con bastante calidad de imagen; y al georradar portátil IDS Hi-Mode, utilizado para exploraciones en pequeñas superficies y espacios cerrados, trabajos de detección arqueológicos o estudios forenses y crimonológicos, entre otras cosas, forman parte del equipamiento que esta unidad utilizará para llevar a cabo diversas acciones de investigación no invasiva aplicada a los estudios históricos, arqueológicos y patrimoniales.
Es importante indicar que el equipo de investigadores del Laboratorio de Historia de IVAGRO está además a la espera de ejecutar dos proyectos de infraestructuras adicionales, concedidos respectivamente en la convocatoria de la Junta de Andalucía de 2017 y del Ministerio de 2019.