El Colegio Oficial de Graduados Sociales de Cádiz y Ceuta, representado por su presidente, José Blas Fernández Sánchez, se une hoy a la conmemoración del Día Mundial contra el Trabajo Infantil para exigir de manera contundente una postura de tolerancia cero frente a cualquier forma de explotación laboral que afecte a los niños y los someta a situaciones de abuso y maltrato. “En pleno siglo XXI, resulta inaceptable que aún persistan casos de trabajo infantil, y es responsabilidad de toda la sociedad unirse para erradicar esta lamentable realidad”, expresa su presidente.
Desde esta institución, se destaca que el compromiso con el desarrollo de un trabajo digno y seguro como medio de subsistencia y crecimiento personal es uno de los pilares fundamentales de la profesión de Graduado Social. Por lo tanto, “el trabajo infantil debe ser firmemente denunciado y repudiado por todos los profesionales que conforman el ámbito del Derecho Laboral. La explotación de los niños y niñas debe conmover y sensibilizar a todos, y los graduados sociales, como parte integral del tejido profesional relacionado con las relaciones laborales, no pueden permanecer indiferentes ante esta realidad condenable y mezquina”, destaca José Blas Fernández Sánchez. «La sociedad tiene la responsabilidad de garantizar que los niños sean tratados como niños, evitando cualquier forma de explotación laboral y asegurando su educación y desarrollo adecuado», afirma José Blas Fernández, presidente del Colegio Oficial de Graduados Sociales de Cádiz y Ceuta. «Es imperativo que persigamos con toda la fuerza de la ley estas situaciones y apliquemos medidas concretas, como la promoción de la escolarización obligatoria, para evitar que los niños ingresen prematuramente al mercado laboral», agrega.
El Colegio Oficial de Graduados Sociales de Cádiz y Ceuta reafirma su compromiso en la lucha contra el trabajo infantil y realiza un llamamiento a la sociedad en su conjunto, a los profesionales del ámbito laboral y a los responsables políticos a unirse en esta causa para garantizar un presente y un futuro libres de explotación y maltrato para todos los niños y niñas.