El Taller Resistencia Artística 19-22 pone en escena “un amplio abanico de emociones”, convertido en un “alegato de la vejez”
Un grupo de mayores de 65 años decidió hace varios meses participar en el Taller Resistencia 19-22, organizado por el Colectivo Ciudad y Teatro, y trasladar al escenario del Teatro Villamarta sus experiencias vitales durante la pandemia. El fruto de este trabajo se podrá ver en el coliseo jerezano el próximo viernes día 11 de febrero (20.30 horas) al precio simbólico de 5 euros. La recaudación se destinará a la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer de Jerez.
Francisco Camas, teniente de Alcaldesa de Dinamización Cultural y Patrimonio Histórico, calificó de “emocionante” esta experiencia en la presentación de este proyecto participativo ante los medios de comunicación. “El Teatro os acoge con los brazos abiertos”, apuntó, al tiempo que señaló que propuestas de este tipo convierten al Villamarta “en un edificio con alma y corazón. Un edificio que interactúa con los ciudadanos”. Asimismo, aseguró que quienes asistan a este espectáculo “aprenderán mucho” de las vivencias de sus protagonistas.
Isamay Benavente, directora del teatro jerezano, agradeció el compromiso del grupo de 16 mayores de 65 años que asumen este reto, puesto que, entre otras cosas, “no han faltado a ningún ensayo”, explicó. La máxima responsable del Villamarta recordó que no es el primer proyecto participativo que se ha puesto en marcha y que, en esta ocasión, “nos parecía acertado dedicarlo a este colectivo que tanto ha sufrido durante la pandemia”. En su opinión, “el teatro es una forma de sanar”.
“Ha sido un camino emocionante. Hemos partido sólo de su interés en participar y, desde sus experiencias durante la pandemia, se ha elaborado el texto y construido las diferentes escenas”, informó Eduardo Aguirre de Cárcer, uno de los tres profesionales de las artes escénicas del Teatro de la Abadía y la Compañía Nacional de Teatro Clásico que forman parte del Colectivo Ciudad y Teatro, organizador de este taller. Los otros dos actores que han hecho las veces de profesores teatrales son Inma Nieto y Miguel Cubero.
Momentos muy humanos
“De la luz que irradia cada uno se ha ido creando el espectáculo”, indicó Aguirre de Cárcer. Lo que verá el público será “un amplio abanico de emociones” que transitan por los recuerdos, anhelos, sentimientos hasta conformar “un alegato de la vejez” con “momentos muy humanos y bellos”. Tras destacar la generosidad y entrega de este grupo de mayores de 65 años durante los ensayos, afirmó que “la energía e intensidad que transmiten no tiene precio”.
En similares términos se expresó Miguel Cubero. “Se han comportado como verdaderos profesionales. Es un grupo bastante especial y tienen mucho arte”, precisó. Incluso Cubero llegó a decir que en este tiempo compartido con sus alumnos “los que vamos a aprender somos nosotros”.
Los miembros de esta improvisada compañía fueron tomando uno a uno la palabra durante la rueda de prensa. Además de transmitir la gratitud hacia el Teatro y sus profesores teatrales, coincidieron en la idea de sentirse útiles, además de haber recobrado la alegría y la vitalidad olvidando sus propios pesares. “Hemos intentado dar lo mejor de nosotros”, manifestaron. Lamentaron que “nuestra experiencia ya no cotice” en esta sociedad, reivindicaron que “estamos vivos” y pusieron especial énfasis en indicar que la vejez es un momento de la vida en que, tarde o temprano, “vamos a estar todos”.