El objetivo de la jornada era poner de relieve que el ejercicio físico puede convertirse en una herramienta terapéutica complementaria junto a los tratamientos oncológicos
Pacientes, familiares y profesionales sanitarios han participado en una mesa redonda sobre ejercicio físico y cáncer celebrada en el Hospital Universitario de Puerto Real, una iniciativa que ha tenido como principal objetivo poner en evidencia que el ejercicio físico puede convertirse en una herramienta terapéutica complementaria junto a los tratamientos oncológicos, con el fin de mejorar la calidad de vida de los pacientes que los reciben.
La mesa ha contado con la participación de David Jiménez Pavón, profesor e investigador titular de Ciencias del Deporte en la Universidad de Cádiz, responsable del proyectos OACCUs a nivel Europeo y proyecto Move-it entre otros; Noelia Caballero Galán, enfermera de Quirófano del Hospital de Puerto Real y que actualmente se encuentra finalizando un proceso de tratamiento contra el cáncer que le fue diagnosticado hace menos de un año; y Mila Ogalla Toledo, joven superviviente de cáncer y colaboradora en el proyecto OACCUs junto a David Jimenez. La moderadora ha sido la supervisora de Hospital de Día Oncológico y Farmacia del centro, Carmen María Girón Lacalle.
Asimismo, se ha contado con la intervención extraordinaria de Marzena Wieczorek-Przybylo, una estudiante de origen polaco que está realizando un Doctorado a cerca del Ejercicio Físico y sus efectos beneficiosos para pacientes con cáncer en colaboración con la UCA y tutorizado por David Jiménez. Marzena también fue diagnosticada de un Linfoma con un mal pronóstico y actualmente se encuentra prácticamente curada, tras cinco años desde el diagnóstico.
La actividad física a partir de los 150 minutos semanales (20 minutos diarios) que se puede incrementar a un nivel superior a partir de los 300 minutos semanales, según las últimas recomendaciones de la OMS, aporta beneficios físicos, como la disminución de la probabilidad de padecer enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión, cáncer y demencia y de mejorar su control se aparecen. Además, reduce los síntomas de la depresión y la ansiedad. Se han de combinar ejercicios de tipo aeróbico con ejercicios de fuerza, adaptados siempre a la edad, estado físico y gustos de cada persona.
La jornada puso encima de la mesa que el ejercicio físico podría formar parte dentro de una serie de pautas un complemento importantísimo por los beneficios que aporta, dentro de consejos no Farmacológicos para mejorar la calidad de vida y el afrontamiento que realizan los pacientes ante su proceso de cáncer. Por ello, la prevención a niveles de Atención Primaria cobra una gran importancia al conocer datos tan significativos.
El proyecto UOCCUs dispone de una serie de recursos en su página web al alcance de todos los pacientes con cáncer.