En las calles San Ignacio y Prolongación de Santa María se está procediendo a la renovación del acerado, aumentado sus dimensiones para facilitar el tránsito de las personas con movilidad reducida. Es una actuación comprometida por las demandas de las asociaciones vecinales de la ciudad.
El Ayuntamiento de San Fernando informa que se ha comenzado en el día de hoy la reforma del acerado que transcurre entre las calles San Ignacio y Prolongación de Santa María del último tramo de la avenida de Pery Junquera. El concejal de Infraestructuras y Renovación Urbana, Javier Navarro, ha estado presente en el comienzo de las obras, junto al presidente de la Federación de Vecinos Isla de León, Antonio Romero, y su homólogo, de la Asociación Vecinos de Prolongación de Santa María, Miguel Ángel Aparicio.
Esta reforma se realiza en una zona de unos 450 metros cuadrados, que se halla deteriorada debido al paso del tiempo y su uso constante, siendo una demanda por parte del colectivo vecinal. Se interviene en este tramo, según Navarro, “para mejorar la calidad de vida de la vecindad en general, para las personas usuarias de los garajes, así como para las personas con movilidad reducida”.
En la actualidad esa zona tiene varios desniveles, parterres y escalones lo que dificulta la movilidad, especialmente de las personas con movilidad reducida. Precisamente, para mejorar la accesibilidad se ampliará y mejora el espacio de la acera para poder transitar, ya que actualmente no tiene espacio para transitar y tiene que hacerlo por la calzada rodada.
“Gracias a esta obra que hoy se inicia vamos a mejorar sustancialmente el pavimento de la zona, ampliando las dimensiones actuales de la acera, muy importante para personas con movilidad reducida, vamos a crear nuevos espacios verdes, embelleciendo esta parte de La Isla y, además, facilitando el acceso para las personas residentes”, ha comentado el concejal de Infraestructura y Renovación Urbana.
La obra, llevada a cabo por la empresa Tomás Martín SL, tiene un plazo de ejecución previsto de tres meses, con un coste de 42.359 euros, IVA incluido.
Estas mejoras en la movilidad sostenible tienen como objeto, además de mejorar la accesibilidad para las personas con movilidad reducida, el potenciar las grandes vías de comunicación y reducir la circulación por calles más pequeñas. Estas obras se suman al proceso de renovación del asfaltado que se está acometiendo en diversas calles de la ciudad, con una inversión cercana a los 1,2 millones de euros. Unas actuaciones consensuadas con el movimiento vecinal y las organizaciones más representativas del tejido productivo local, atendiendo para ello a sus principales demandas.
Esta importante partida se suma a la destinada de manera global a otras intervenciones de mantenimiento urbano que van desde la mejora en las aceras o pintura a la reposición y renovación de mobiliario urbano, entre otras. Para Navarro, estas intervenciones suponen “un proceso de mejora continua del manteniendo de las diferentes barriadas de la ciudad con el objetivo de construir y generar entornos más amables que inviten a ser vividos y paseados por toda la ciudadanía”.