La ciudad de Cádiz ha vivido una jornada de alta tensión con motivo del inicio de la huelga en el sector auxiliar del metal, convocada tras el estancamiento de las negociaciones entre la patronal Femca y los sindicatos. La protesta, impulsada por las reivindicaciones laborales de los trabajadores, ha derivado en cortes de tráfico, disturbios, cargas policiales, varios detenidos y un herido grave.
Desde primera hora, los accesos a la ciudad quedaron bloqueados por barricadas y fuegos en los puentes José León de Carranza y de la Constitución, dificultando gravemente la circulación. Al mismo tiempo, un incendio provocado en la infraestructura ferroviaria obligó a Renfe a interrumpir temporalmente el tráfico de trenes de entrada y salida a Cádiz.
Las movilizaciones se expandieron rápidamente por distintos puntos de la ciudad. Manifestantes procedentes de factorías como Navantia iniciaron una marcha por la avenida principal, coreando consignas en defensa del sector y sumando apoyos a las protestas. En el entorno del estadio Nuevo Mirandilla, grupos de trabajadores se concentraron frente a los juzgados en solidaridad con tres empleados procesados por anteriores movilizaciones.
Las primeras cargas policiales se produjeron en la zona del Río San Pedro, en Puerto Real, donde los manifestantes fueron desalojados de la carretera y se dispersaron por la barriada. Más tarde, la tensión se trasladó a la sede de Femca, en la barriada de Loreto. Allí, el lanzamiento de huevos y objetos contra la Policía desencadenó nuevas intervenciones policiales y la dispersión de los huelguistas por calles adyacentes, como Hidroavión Numancia.
A medida que avanzaba la mañana, los disturbios se intensificaron. En la avenida principal de Cádiz se registraron fuegos en la calzada, cargas policiales y el uso de pelotas de goma. Una persona ajena a las protestas resultó herida tras recibir una pedrada en la cabeza en la avenida Ana de Viya. Hasta ese momento, las autoridades habían confirmado ya cuatro detenciones.
Los disturbios se extendieron también a la avenida Marconi, donde continuaron los lanzamientos de piedras y el incendio de contenedores. Dos nuevas detenciones, una de ellas a un menor de edad, elevaron el balance provisional a seis personas arrestadas.
La situación comenzó a estabilizarse a mediodía, aunque la circulación seguía siendo complicada en varias arterias de la ciudad, especialmente en la avenida de Astilleros, donde las barricadas continuaban activas. El tráfico en el centro de Cádiz se vio afectado durante toda la jornada, con fuertes retenciones y desvíos hacia vías alternativas como la Cuesta de las Calesas.
Las reivindicaciones del sector incluyen la eliminación de la doble escala salarial en el plus de tóxicos, la regularización de los contratos fijos discontinuos y una subida salarial vinculada al IPC. La huelga continuará el jueves y podría convertirse en indefinida a partir del próximo domingo si no se alcanza un acuerdo entre las partes.
