El rector de la UCA, Francisco Piniella, y el alcalde de Villamartín, Juan Luis Morales, han mantenido una reunión para abordar y poner en marcha distintas líneas de trabajo conjuntas relacionadas con la investigación en el ámbito de la agroalimentación en dos de los sectores industriales y económicos más pujantes del municipio: el vino y el queso. Una voluntad colaborativa que, a partir de la concreción de los ejes de actuación, se formalizará con el correspondiente convenio entre ambas instituciones.
En el encuentro, celebrado en el consistorio serrano y que contó con la presencia del decano de la Facultad de Ciencias de la UCA, José Manuel Gómez, se pusieron en conexión las potencialidades docentes y científicas en agroalimentación de la Universidad de Cádiz con las necesidades de investigación y de innovación de distintos sectores preferentes que dinamizan la economía del municipio y la comarca, como es el caso del vino y el queso.
La Universidad de Cádiz es un referente nacional e internacional en agroalimentación. La oferta académica de la Facultad de Ciencias cuenta con los grados en Química y en Enología, así como con el máster en Agroalimentación o el programa de doctorado en Recursos Agroalimentarios.
Además, en el plano científico, en la UCA desarrolla su actividad el Instituto Universitario de Investigación Vitivinícola y Agroalimentaria (IVAGRO), cuyo objetivo es el fomento de la formación y la investigación de excelencia a través de distintas acciones como la realización de proyectos de I+D+i, la transferencia tecnológica al sector productivo vitivinícola y agroalimentario, el asesoramiento tecnológico a empresas, la colaboración para la formación del personal investigador, del personal técnico propio y del personal técnico de empresas, la creación de empresas spin-off de base tecnológica (EBT) y humanística (EBH) o la prestación de servicios a investigadores, instituciones y empresas del sector vitivinícola y agroalimentario.
Para el rector de la UCA, “el impulso de líneas de colaboración conjuntas pone de manifiesto dos relevantes realidades. Por un lado, que la Universidad de Cádiz es la universidad de toda la provincia y que tenemos que trabajar para incrementar nuestra actividad y presencia en la comarca de la sierra. Y, por otro, que nuestra responsabilidad social corporativa nos obliga e impulsa a tejer líneas de cooperación para la generación y transferencia de conocimiento con todos los sectores socioeconómicos para ser más útiles con el entorno”.