El Restaurante Universo Santi, inaugurado en 2017 en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera de la mano de la Fundación Universo Accesible como proyecto gastronómico de inclusión sociolaboral, llevó a cabo, el pasado sábado y de la mano de Colgate en la campaña ‘Historias de sonrisas’, la presentación de los cursos de formación en alta cocina para siete personas con discapacidad intelectual, que tendrán la oportunidad de aprender, en un espacio único, los entresijos de la alta cocina.
Dichos cursos tendrán una duración de seis meses, incluyendo tres meses de prácticas en el restaurante, y comenzarán en septiembre. De esta forma Marta, Fran, Pepe, Ainhoa, Lidia, Julia y Ana, los siete chicos que participan, tendrán la oportunidad de conocer cómo se trabaja en cocina y cómo se trabaja en sala de cara a un futuro laboral abierto gracias a la colaboración de Universo Accesible y Colgate.
El presidente de la Fundación Universo Accesible, Antonio Vila, ha declarado a Europa Press que los cursos, financiados por Colgate, se enmarcan en el programa ‘Historias de sonrisas’ que es, además, «el concepto nuevo que se quiere incorporar al restaurante, con personas que, dentro de la dificultad, tanto de la situación de la pandemia como de la situación de su discapacidad, sonríen, son agradables y, bajo la excelencia de la alta gastronomía, dan un servicio de máxima calidad».
En esta línea, Vila ha apuntado que «es una oportunidad única para los siete chicos en formación». «Todos tienen una discapacidad intelectual: síndrome de down, asperger, autismo…, y nunca han tenido una experiencia en la cocina y, probablemente, no hayan trabajado nunca», ha sostenido el presidente de Universo Accesible, que ha confesado que «es la parte más importante y los propios padres lo transmiten, porque tienen todas las esperanzas puestas en que aprendan estos meses que van a estar de formación teórico-práctica con dos monitores contratados por la Fundación, Antonio y Rocío, para darles la formación al alto nivel en sala y en cocina».
De hecho, Vila ha recordado que «los tres últimos meses ya son en prácticas y, de ahí, se seleccionarán a los mejores que, posiblemente, se incorporen a la plantilla de Universo Santi, que es el objetivo de cada uno de ellos y de sus padres», aunque ha matizado que «ojalá fueran todos, pero por experiencia sabemos que algunos al final no terminan incorporándose».
Además, el promotor de Universo Santi ha explicado que «los padres, cuanto entraron por primera vez y vieron el espacio: un restaurante de más de 800 metros cuadrados, con múltiples salones, con capacidad para más de 100 comensales, con una capilla interior, las cocinas míticas de Santi Santamaría que se trasladaron desde Barcelona a Jerez, la finca con más de siete hectáreas, las colecciones de arte que hay en la pared…, se quedaron muy impresionados con lo que allí había».
Para poder participar en el curso, Vila ha explicado que lo único necesario era «tener alguna discapacidad intelectual, más de 18 años y estar inscrito como demandante de empleo». En cualquier caso, ha detallado que «posteriormente se hizo una entrevista personal para ver la ilusión y la pasión de ellos, algo que para nosotros es fundamental».
Además, ha comentado la singularidad de que en el curso «hay hasta un influencer». Y es que Pepe, uno de los siete alumnos «tiene más de 70.000 seguidores en TikTok», algo que muestra el tipo de perfiles que Universo Santi ha buscado para los cursos, «gente que tenga ganas de triunfar en la vida para un proyecto tan ilusionante como este».
Además, ha recordado que Universo Santi «no suele hacer tantos cursos al año porque son con compromiso de contratación, es decir, que las personas aprenden, terminan y trabajan, y se forman para el propio restaurante, pero se cogen a los mejores y a los que tienen ganas de trabajar, que no siempre son el 100% de la formación, ojalá». Así, ha afirmado que «ese es el objetivo y el compromiso con Colgate», aunque ha matizado que «no se puede dar un curso de formación a 15 personas a la vez con discapacidad intelectual con dos monitores» y que «lo que se ha hecho es reducirlo a siete para que puedan aprender mucho más y centrarse en ellos».
En este sentido, Vila ha afirmado que en los cursos de Universo Santi «ha habido gente de toda España porque se está convirtiendo en el referente de formar gente con discapacidad en alta gastronomía». Así, el restaurante jerezano «ha tenido chicos de otras ciudades que han venido, han aprendido, se han empleado y se han vuelto a sus ciudades», según ha detallado el presidente de Universo Accesible, algo que ha ejemplificado con Alejandro, un chico malagueño de 22 años con síndrome de down que fue a vivir sólo a Jerez, empezó a trabajar y, tras una visita de Alberto Chicote, le surgió una colaboración con Dani García en Málaga y volvió a su tierra a trabajar.
Por ello, Vila se ha mostrado orgulloso de la trayectoria de los empleados «cuando llegan a un sitio con experiencia en alta gastronomía, algo que es muy difícil porque no hay cursos homologados de alta cocina en este país, sino que los restaurantes de la Guía Michelín forman a sus plantillas».