En el Consejo de Administración se ha informado de la situación real de la sociedad en 2021, demostrando que a día de hoy la empresa ha mejorado incluso la cifra de negocio de 2019, por lo que cuenta con la previsión de cerrar el presente ejercicio con superávit
El Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Movilidad y Aparcamientos de Cádiz (Emasa) ha rechazado esta mañana la aprobación de la cuenta general del ejercicio 2020. En concreto, este punto del orden del día ha sido tumbado con los votos en contra del PP, PSOE y Ciudadanos.
El presidente del Consejo de Administración de Emasa, Martín Vila, ha lamentado y criticado este “boicot” por parte de la oposición, “que en ningún momento ha argumentado razones para desestimar estas cuentas. Ninguno de los consejeros, ni Juancho Ortiz (PP), ni Natalia Álvarez (PSOE), ni Carmen Hidalgo (Ciudadanos) han alegado motivo alguno a pesar de habérselo reclamado expresamente”.
Es por ello que Vila les ha otorgado un plazo de cinco días hábiles para que especifiquen por escrito cuáles son los aspectos de la formulación de las cuentas del ejercicio 2020 que rechazan. Y ello, con objeto de volver a convocar una nueva reunión del Consejo de Administración de Emasa para la aprobación de dichas cuentas.
Cabe recordar que el sector del aparcamiento se vio gravemente afectado por las restricciones de movilidad y el confinamiento, por eso las cuentas de 2020 arrojan unas pérdidas de un millón de euros. A lo que hay que añadir también la decisión de sustituir a todo el personal con cualquier dolencia durante el periodo de la pandemia o bien, la gratuidad del uso de los aparcamientos subterráneos al personal sanitario. No obstante, estas pérdidas se vieron paliadas con la formalización de un crédito ICO por valor de 1,1 millones de euros. Una póliza de crédito que ni tan siquiera ha hecho falta agotarla. Y asimismo, para fortalecer a la sociedad se amplió el capital social incorporando la tribuna del Estadio Nuevo Mirandilla que tiene un valor de 4 millones de euros. Por todo ello, queda demostrado que se ha actuado para garantizar la viabilidad de la empresa.
Lo llamativo es que en el Consejo de Administración, para ampliar la información a los consejeros, y sin que fuera necesario en ese punto para la aprobación de la cuenta general, se ha informado de la situación real de la sociedad en 2021, demostrando que a día de hoy la empresa ha mejorado incluso la cifra de negocio de 2019, por lo que la empresa, lejos de verse en peligro, tiene la previsión de cerrar el presente ejercicio con superávit. Todo ello en un año en el que durante el primer trimestre hubo restricciones a la movilidad.
Por todo esto, el presidente de Emasa asegura “no entender el boicot a la aprobación de una cuenta general, hecho éste que sí que puede poner en peligro a la sociedad, por lo que se ha exigido que, por escrito, los consejeros manifiesten qué objeción tienen a la cuenta general para así convocar de nuevo el Consejo de Administración”.
Vila recuerda que el PP ya trató de “mandar a la quiebra a Emasa en 2014 con la obra del aparcamiento de Astilleros, y nosotros como Equipo de Gobierno lo frenamos, para garantizar la continuidad de la empresa y de los puestos de trabajo. Por eso lamentamos que Juancho Ortiz vuelva a la carga con esa intención acompañados del PSOE y de Ciudadanos”.